La cerámica es un oficio en Tlalpujahua totalmente artesanal, que busca ser valorado, pues el municipio no solo es exponente en esferas y cantera, comentó el guía turístico Andrés Arredondo.
En eso coincidió el artesano Alejandro Negrete Ramírez, quien fundó su fábrica Cerámica Real desde hace 20 años y además estudió en la Escuela de Artesanías del Instituto de Bellas Artes, y fue aprendiz de maestros japoneses.
Para Negrete Ramírez la cerámica a veces no es muy bien valorada por el costo de los artículos, pues debido al proceso de producción suelen elevarse, sin embargo, acotó que hay piezas desde los 60 hasta los 5 mil 500 pesos en su fábrica.
El costo del barro o artesanía popular es más caro por el tipo de proceso, entonces a nivel proceso hay gran diferencia de precios
Su taller comenzó con cuatro personas y con el tiempo se extendió a 15, aunque han trabajado con él hasta 35 personas; pese a que trabajan por encargos o pedidos, el artesano asegura que no laboran a velocidad, sino que prefieren el detalle y el proceso artesanal.
De acuerdo al señor Alejandro se requieren de ocho procesos para ver una pieza terminada: la preparación de la pasta, mezclado, forjado a máquina o a mano, vaciado, pulido, sancochado, esmalte y decorado.
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Aunque admite que son los turistas y visitantes quienes más compran estos productos, también refirió que surten a restaurantes y cafeterías, además de estos mismos comercios en Estados Unidos que ofrecen comida mexicana.
Su equipo fabrica alrededor de 200 piezas o artículos diferentes y un promedio de 100 al día, aunque no tiene una cifra exacta de lo que trabajan, además, envían sus piezas a ciudades como Querétaro, Ciudad de México y Morelia.
