Morelia, Michoacán.- Con el fin de identificar, proteger el patrimonio cultural así como preservar, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), ha declarado mil 84 sitios con valor universal excepcional, y de estos, seis pertenecen a Michoacán.
Las tradiciones y los recursos naturales, son por el que se ha reconocido los seis patrimonios a Michoacán, que son: el Centro Histórico de Morelia, La Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca, la Noche de Muertos, La Pirueka, Los Voladores de San Pedro Tarímbaro y la Cocina Tradicional.
⏩ Te puede interesar: Voladores de San Pedro Tarímbaro, una tradición ancestral poco conocida [Vídeo]
Centro Histórico de Morelia
La capital michoacana cuenta una belleza inigualable, y fue nombrada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1991.
El Centro Histórico de Morelia está llena de historia y de cultura, en donde puedes recorrer la avenida y ver su cantera rosa con toques coloniales y admirarlas edificaciones barrocas que datan del siglo XVI.
Antes de ser llamada Morelia, originalmente la capital se llamaba Valladolid, pero se cambió el nombre en 1828, en honor al héroe de la Independencia de México, José María Morelos y Pavón.
Morelia mantiene viva su riqueza histórica, leyendas, gastronomía y arquitectura que encanta a todo el mundo que llega a visitarla.
Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca
La Reserva Biosfera Mariposa Monarca tiene una extensión de 56 mil 259 hectáreas de bosques de oyamel, pino y encino, y se encuentran en los cinco santuarios: Contepec, Senguio, Angangueo, Ocampo y Zitácuaro.
Esta reserva fue nombrado como Bien de Patrimonio Mundial Natural en el 2008.
La mariposa monarca es una de las especies más extendidas en el continente americano, ya que migran anualmente de Estados Unidos a los bosques mexicano y viceversa.
⏩ Te puede interesar: Ruta de carnitas: 3 municipios para comer este tradicional platillo de Michoacán
Noche de Muertos
La Noche de Muertos fue reconocida como Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad en el 2003. Esto se debe a que Michoacán mantiene viva las costumbres de recordar a los que ya no están con nosotros.
Los días 1 y 2 de noviembre, los hogares, panteones y veredas se llenan de altares, flores, comidas y velas para venerar a nuestros familiares que se nos adelantaron.
En cada municipio de la entidad michoacana tienen sus propias costumbres y creencias para celebrar a los muertos y así recordarlos y festejar con ellos. Sin embargo, los más importantes en donde se vive más esta tradición son en Pátzcuaro, Janitzio, Jarácuaro, Ihuatzio y Tzurumútaro.
La pirekua
La Unesco reconoció a la Pirekua como Patrimonio Cultural inmaterial de la Humanidad en el 2010, debido a que las canciones que canta la pirekua es de la cultura purépecha.
La Pirueka es un canto tradicional de las comunidades indígenas de Michoacán. Cuentan con una diversidad de estilos desde africanas, europeas y amerindias. Se canta por regla general con un ritmo lento.
Se puede cantar en solo, en dúo o en trío y se puede ir acompañado de coros, orquestas de cuerda y conjuntos musicales de instrumentos de cuerda y viento a la vez.
Voladores de San Pedro Tarímbaro
Este otro patrimonio, los Voladores de San Pedro Tarímbaro fueron reconocidos por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial en el 2009. Estos tradicionales voladores se encuentran en la población de San Pedro Tarímbaro, cerca del pueblo mágico de la eterna navidad, Tlalpujahua.
Los Voladores de San Pedro Tarímbaro honran a la imagen de San Pedro Apóstol, y realizan un ritual relacionado a la fertilidad y los ciclos de la naturaleza para pedir un buen temporal y abundancia en las tierras.
Los cuatro voladores representan los puntos cardinales y el caporal, que toca la flauta y el tambor que va en la punta del mástil, emula al centro de la Tierra y el descenso representa la caída de la lluvia.
Los Voladores de San Pedro Tarímbaro visten con pantalón y chaleco rojo, camisa blanca, con cintas de colores y un tipo boina tricolor. Esa vestimenta hace referencia al pájaro carpintero, que es considerado como el guardián de los bosques.
Cocina tradicional
La cocina tradicional de Michoacán mantiene viva la cultura gastronómica a través de las manos de las cocineras que preservan el sazón de sus ancestros.
Los ingredientes y las recetas que se pasan de generación en generación se convirtió en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en el 2010.
La gastronomía michoacana se ha mantenido viva sus recetas gracias a que se pasan de generación en generación en donde se preparan en ollas de barro, metates y comales.
Los platillos más típicos de todas las regiones están el churipo con corundas, los uchepos, los quesos, licores y dulces.
Las diferentes técnicas culinarias han perdurado por años, tal como la nixtamalización, cuya técnica de cocción no utiliza grasa, por lo que hace que los platillos sean sanos.
