Morelia Michoacán (OEM-Infomex).- La violencia de género, un problema que aqueja a cualquier sociedad sin importar fronteras, se ha convertido en los últimos años en un tema de agendas políticas y sociales en los que destaca como principal objetivo la concientización del tema.
Un sector que tampoco ha ignorado el poder de influencia que tiene sobre sus espectadores, es la industria cinematográfica; y en este caso, el cine y la televisión también han fungido como medios que buscan evidenciar la violencia de género a través de historias que logran conectar de una manera más entretenida con la audiencia.
A través de los años, el tema ha sido llevado a la pantalla chica y grande en múltiples historias donde se aborda la violencia de género a través de distintas perspectivas y narrativas; sin embargo, hay algunas producciones que han logrado destacar más que otras.
En 1985, se estrenó El color púrpura, un filme que además destacar en la industria cinematográfica por obtener 11 nominaciones en los Premios Oscar, también sobresalió en pláticas sociales por reflejar la historia que viven miles de mujeres, aquella donde intentar sobrevivir día a día es un logro después de llevar una vida de décadas en las que la protagonista ha sido sometida a todo tipo de abusos y maltratos.
Y cuando de abusos se habla, la violencia que se genera en una relación sentimental es una de las más comunes que llegan a padecer las mujeres. De acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), al menos el 35% de este sector de la población ha experimentado alguna agresión física o sexual por parte de su pareja íntima.
En relación con ese tema, está enfocada la trama de Durmiendo con el enemigo, un clásico protagonizado por Julia Roberts que refleja el extremo al que tiene que llegar una mujer para escapar de su principal acosador: fingir su muerte para huir de la pesadilla.
Ahora bien, si escapar de tu principal acosador definitivamente no es tarea sencilla, enfrentarte a toda una sociedad que te discrimina y te violenta, complica mucho más las cosas. Entorno a esta premisa y basada en hechos reales, gira la historia de En tierra de hombres, cinta estrenada en 2008 y protagonizada por Charlize Theron que refleja todas las humillaciones tanto laborales como sociales a las que se enfrenta una madre soltera.
El tiempo pasa, la tecnología avanza y la violencia de género continúa existiendo en cada sociedad. Incluso en una producción distópica como es el caso de El cuento de la criada, una serie basada en la novela homónima de Margaret Atwood que refleja los principales problemas catastróficos a los que se enfrentaría el mundo si se sigue explotando de la forma en que se hace ahora.
Ignorar estos temas que afectan directamente a la sociedad, en lugar de desaparecerlos solamente logra que se sigan propiciando más acciones de este tipo; porque cuando se pierde la capacidad de asombro, las violaciones se convierten en algo cotidiano que llegan a ser minimizadas por las propias autoridades, tal y como sucedió en Inconcebible, la mini serie de Netflix que está basada en el hecho real de un abuso sexual que tuvo que pasar años y desencadenar en múltiples investigaciones para que se considerara como verdadero.
En el ámbito familiar, de pareja, laboral y dentro de la misma sociedad, la violencia de género es un tema que se ha buscado concientizar en múltiples formas y formatos, pero que a pesar de ello, todavía continúa día a día generando víctimas.
