/ domingo 16 de mayo de 2021

El Culiacanazo inspira la novela de Élmer Mendoza

El 17 de octubre de 2019 "supimos que estábamos en guerra", dice el escritor sinaloense Élmer Mendoza

Se podría pensar que alguien que escribe sobre violencia y narcotráfico tiene una vida agitada. El caso de Élmer Mendoza (Culiacán, 1949) es diferente. Él se levanta a las seis de la mañana y se duerme a las diez y media. Es su rutina inviolable desde que era la joven promesa de la ingeniería electrónica. Pero una noche, encerrado en su habitación, escribió sin control. Sin advertirlo, los primeros rayos de luz cayeron sobre sus manos. Había escrito más de 100 páginas.

"Me quedé frío. No había dormido. Me pregunté qué había pasado con los relojes, qué había pasado con la Tierra. En ese momento supe que quería ser escritor".

▶️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias

Aquella epifanía fue el inicio de una carrera brillante en el género de la novela negra. Con el tiempo, se volvió referencia obligada de la narcoliteratura, como muchos la llaman. Su más reciente novela, Ella entró por la ventana del baño (Alfaguara), es el pináculo de lo que comenzó en un aula de la carrera de letras hispánicas de la UNAM, en donde sus compañeros tenían 10 años menos que él.

La tarde del 17 de octubre de 2019 era una como cualquier otra. Un día más como presidente del Colegio de Sinaloa. Como casi todos los culichis, está acostumbrado a las ráfagas de cuerno de chivo. Pero aquella tarde fue especialmente cruenta: "Fue la primera vez que supimos que estábamos en guerra", recuerda.

Se refiere al Culiacanazo, como se conoce al enfrentamiento armado entre militares y el cártel de Sinaloa para capturar a Ovidio Guzmán López, hijo del que entonces era el capo más buscado por el FBI: Joaquín el Chapo Guzmán.

"Llegaron camionetas con armas largas disparando. Muchos huían, gritaban. Fue aterrador", recuerda Élmer Mendoza, quien se inspiró en ese momento para escribir una novela en la que los disparos y el erotismo dibujan un retrato violento de la condición humana.

Aquel 17 de octubre de 2019, el autor de Balas de plata (2008) abrió las puertas del Colegio de Sinaloa para refugiar a todas las personas que no querían acabar en la lista oficial de los daños colaterales. "Era la hora más concurrida, cuando los niños salen de las escuelas, los estudiantes caminan por las calles, oficinistas salen a comer. Todos nos escondimos en los cuartos del colegio. Fue algo muy parecido a estar en guerra. Una indefensión total".

Saberse vulnerable ante las balas le hizo recordar que la literatura, a veces, es tan efímera como la vida. "Si acaso dura un día más que el periodismo", asegura.



Te recomendamos el podcast ⬇️

Acast

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Deezer

Amazon Music

Se podría pensar que alguien que escribe sobre violencia y narcotráfico tiene una vida agitada. El caso de Élmer Mendoza (Culiacán, 1949) es diferente. Él se levanta a las seis de la mañana y se duerme a las diez y media. Es su rutina inviolable desde que era la joven promesa de la ingeniería electrónica. Pero una noche, encerrado en su habitación, escribió sin control. Sin advertirlo, los primeros rayos de luz cayeron sobre sus manos. Había escrito más de 100 páginas.

"Me quedé frío. No había dormido. Me pregunté qué había pasado con los relojes, qué había pasado con la Tierra. En ese momento supe que quería ser escritor".

▶️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias

Aquella epifanía fue el inicio de una carrera brillante en el género de la novela negra. Con el tiempo, se volvió referencia obligada de la narcoliteratura, como muchos la llaman. Su más reciente novela, Ella entró por la ventana del baño (Alfaguara), es el pináculo de lo que comenzó en un aula de la carrera de letras hispánicas de la UNAM, en donde sus compañeros tenían 10 años menos que él.

La tarde del 17 de octubre de 2019 era una como cualquier otra. Un día más como presidente del Colegio de Sinaloa. Como casi todos los culichis, está acostumbrado a las ráfagas de cuerno de chivo. Pero aquella tarde fue especialmente cruenta: "Fue la primera vez que supimos que estábamos en guerra", recuerda.

Se refiere al Culiacanazo, como se conoce al enfrentamiento armado entre militares y el cártel de Sinaloa para capturar a Ovidio Guzmán López, hijo del que entonces era el capo más buscado por el FBI: Joaquín el Chapo Guzmán.

"Llegaron camionetas con armas largas disparando. Muchos huían, gritaban. Fue aterrador", recuerda Élmer Mendoza, quien se inspiró en ese momento para escribir una novela en la que los disparos y el erotismo dibujan un retrato violento de la condición humana.

Aquel 17 de octubre de 2019, el autor de Balas de plata (2008) abrió las puertas del Colegio de Sinaloa para refugiar a todas las personas que no querían acabar en la lista oficial de los daños colaterales. "Era la hora más concurrida, cuando los niños salen de las escuelas, los estudiantes caminan por las calles, oficinistas salen a comer. Todos nos escondimos en los cuartos del colegio. Fue algo muy parecido a estar en guerra. Una indefensión total".

Saberse vulnerable ante las balas le hizo recordar que la literatura, a veces, es tan efímera como la vida. "Si acaso dura un día más que el periodismo", asegura.



Te recomendamos el podcast ⬇️

Acast

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Deezer

Amazon Music

Local

Michoacán atiende 11 solicitudes de aborto tras despenalización

Las solicitudes para interrumpir el embarazo son atendidas en los hospitales estatales

Local

Precio de la canasta básica en Zamora a la baja; este es el mercado más barato

Durante esta semana podrás surtir la canasta básica en menos de mil 200 pesos en Zamora

Cultura

Festival Internacional de Cine del Balsas alista su segunda edición con 60 proyecciones

Este festival se realiza en Lázaro Cárdenas en el mes de diciembre; busca acercar el cine a más comunidades

Local

Recursos insuficientes limitan la Alerta de Género en Michoacán

Para la Seimujer, este mecanismo de la Alerta ya no es funcional y debe actualizarse o mejorarse en sus medidas de prevención, justicia y reparación

Local

Residuos de mango en Jacona y Zamora generan plagas y afectan cultivos de berries

La situación se ha dificultado por el mal manejo de los rellenos sanitarios que se localizan en el Bajío Michoacano