Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El concierto que ofreció la Orquesta Filarmónica del Tzintzuni este domingo en el Palacio Municipal implicó más que el cierre de su temporada dado que entregó a los oyentes algo muy inusual, que fue la conjunción de la música académica, el jazz y un solista en el saxofón.
El músico Juan Alzate señaló en entrevista el carácter inusual de esa combinación: "las orquestas casi no programan música para saxofón en el sentido clásico y mezclado con el saxofón es mucho más raro, porque no hay muchos compositores que sepan mezclar ambas y son pocas las obras".
Te podría interesar: ¿Hubo record con Juan Colorado?, todavía esperan respuesta
El jazzista mencionó que se trata de una situación general en el mundo, no sólo en México. Afirmó que resulta sencillo constatarlo, pues "si te pones a buscar en YouTube conciertos para piano encontrarás que se toca mucho Mozzart o Beethoven, pero el saxofón es rarísimo porque o son autores poco conocidos o a las orquestas no les gusta abordar cosas nuevas o complicadas. Pero una obra como esta es muy amigable y disfrutable para quien toca y quien escucha".
Esto último lo dijo en referencia a la obra que interpretó junto a la Orquesta Filarmónica, que dio cierre al concierto y la que de hecho tuvo bastante aceptación del público: "Concierto para saxofón", del joven compositor inglés Luke Anthony.
Lo anterior implica dos cosas, que son las posibilidades creativas de juntar ambos géneros como la necesidad "de romper con los esquemas tradicionales y esto de Luke Anthony es la primera vez que se toca en México".
No sobra anotar que el de este domingo, fue el concierto final en la quinta temporada de la Orquesta Filarmónica del Tzintzuni y junto con Alzate, también se tuvo como invitado al violinista Emiliano Morales.
Esto se debe a que el programa fue muy heterogéneo, que además del jazz incluyó el Romance No. 2 para violín y orquesta de Beethoven y obras del director de la Orquesta, Juan Vázquez, como la Obertura en si bemol, JV 7.
