Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Por primera vez en su historia desde que fue inaugurado el 9 de abril de 1989, el estadio Morelos quedará inactivo tras la mudanza de Monarcas Morelia a Mazatlán, Sinaloa.
Dividido en siete sectores en sus gradas, este inmueble fue estrenado el 9 de abril de 1989, con una capacidad para albergar a poco más de 35 mil aficionados. La inauguración se dio en un partido entre el Atlético Morelia y las Águilas del América, juego que ganaron los llamados “Canarios” por marcador de 2-1.
La obra fue diseñada por el arquitecto David Fuentes Arrona y solventada una parte con recurso del Gobierno del Estado y otra con respaldo de la iniciativa privada, para tener una inversión total de 20 millones de viejos pesos mexicanos.
El grupo de empresarios mexicanos encabezados por Luis Álvarez Barreiro, y respaldado por el entonces gobernador Luis Martínez Villicaña, crearon un patronato pro-construcción del estadio Morelos, financiado en gran medida por la venta de palcos y plateas.
Tras construir la obra, el patronato le entregó el inmueble al Gobierno del Estado. Dicha construcción tuvo una duración aproximada de un año y medio. La primer mejora del inmueble vino en el año 2002, cuando se le instaló el alumbrado para lo que sería la Copa Libertadores.
Con el paso de los años, se le añadieron detalles como una pantalla gigante, torniquetes electrónicos y la instalación de cámaras de seguridad; sin embargo, fue en el 2011 cuando se toma la decisión de modernizarlo colocándole butacas a las gradas.
El estadio Morelos ha sido sede cuatro finales de la Liga Mx, además en este campo se disputaron partidos del Campeonato Mundial Sub-17 en el año 2011 y en febrero del 2016, recibió la visita histórica del Papa Francisco.
CEFOMM, entre dudas
Con la salida de Monarcas de la ciudad, otro espacio que ha quedado a la deriva es el Centro de Formación Monarcas Morelia (CEFOMM), instalaciones que se ubican en el kilómetro 7.5 en la carretera Morelia-Charo y que fueron cedidos en comodato al club por parte del Gobierno del Estado.
Tras el campeonato obtenido en el año 2000, el gobierno en turno apoyó a los dueños de Monarcas para que pudieran contar con una estructura sólida de Fuerzas Básicas, ya que en aquel entonces los chicos que formaban parte de las inferiores entrenaban en las canchas de la Unidad Deportiva Cuauhtémoc (UDC).
Inicialmente este espacio arrancó con la instalación de dos canchas sintéticas, pero con el paso de los años fue creciendo en su infraestructura para albergar a todas las categorías que van desde los 5 y hasta los 14 años de edad.
Se le instaló un gimnasio totalmente equipado, así como un área de enfermería para la atención inmediata en caso de registrarse alguna lesión dentro del terreno de juego, un salón de usos múltiples en el que se realizaban sesiones con personal de psicología y una cafetería.
Antes de que los dirigentes rojiamarillos tomaran la decisión de mudar la plaza a Mazatlán, el centro de formación ya contaba con un total de cinco canchas, tres profesionales de 105 x 60 metros y dos más de futbol 7 con medidas de 35 x25 metros.
Al no contar con una franquicia, el CEFOMM se encuentra abandonado momentáneamente y con ello las categorías de formación que son: Sub-12, Sub-13, Sub-14, Sub-15, Sub-16, Sub-17 y la Sub-20. Asimismo, quedan desprotegidos los “Imperios Monarcas”, los cuales fungían como escuelas de futbol para menores varoniles y femeniles.