Morelia, Michoacán (OEM - Infomex ).- El cáncer de colon es el segundo con mayor tasa de incidencia en hombres y el cuarto en mujeres, y hoy 31 de marzo se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de Colon, por lo cual te hablamos de sus síntomas, y detección.
El cáncer de colon es un tipo de cáncer que comienza en el intestino grueso o colon, que corresponde a la parte final del tubo digestivo y que inicia con un desarrollo descontrolado de las células en el revestimiento interno del colon o del recto, llamado pólipos.
Los pólipos tienden a ser pequeños y generar pocos o ningún síntoma, por lo cual, los médicos recomiendan pruebas de detección regulares para ayudar a prevenir el cáncer de colon mediante la identificación y extirpación de pólipos antes de convertirse en cáncer.
Síntomas del cáncer de colon
En muchos casos, las personas presentan los síntomas que enlistamos a continuación, pero no están enfermas de cáncer, por lo que se sugiere que ante la presencia de cualquiera de estos se consulte con un médico:
- Cambios en los hábitos intestinales, como la diarrea o estreñimiento, por varios días
- Sensación de que se necesita defecar y que no desaparece después de hacerlo
- Sangrado rectal
- Heces oscuras o sangre en las heces
- Cólicos o dolor abdominal
- Debilidad y fatiga
- Pérdida de peso sin explicación
Detección
El cáncer de colon puede detectarse tempranamente, esto con ayuda de un diagnóstico precoz, en el que se consiguen mayores tasas de curación y cirugías menos agresivas. Para la detección se deben realizar pruebas de sangre, una colonoscopia, o una tomografía computarizada.
En caso de confirmarse el cáncer de colon, existen tratamientos para controlarlo, incluso la cirugía, radioterapia y tratamientos farmacológicos como la quimioterapia, es de mencionar que el 90% de los pacientes que padecen este tipo de cáncer se curan.
Como otros tipos de cáncer, existen factores de riesgo para desarrollar un tumor maligno, desde la edad y la alimentación, es por ello que te compartimos cuáles son:
- Edad, el riesgo aumenta después de los 50 años
- Dieta alta en grasas y baja en fibra
- Alto consumo de carnes rojas y embutidos
- Vida sedentaria
- Obesidad
- Antecedente de pólipos colorrectales
- Antecedente enfermedad intestinal inflamatoria (enfermedad de Crohn o colitis ulcerativa)
- Familiares directos que hayan presentado la enfermedad
- Fumar cigarrillo y beber alcohol en exceso