Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Siembra de aguacates, tala inmoderada y quema de los bosques son las razones que han llevado a las comunidades indígenas a estar en una situación complicada ante el cambio climático.
“Ahorita estamos en una crisis ambiental terrible en las comunidades indígenas porque han sido saqueadas por la tala clandestina, o si no consumidas por los incendios forestales e invadidas por la plantación de aguacates, esos temas son los principales problemas de las comunidades indígenas”, dijo Ángeles González Ramos, habitante de la comunidad indígena de Comachuén e integrante del Consejo Forestal de Michoacán.
Aunque los habitantes de Comachuén tienen identificados a quienes realizan las quemas y tala de sus bosques, poco puede hacer la ciudadanía al momento de darse cuenta por quiénes son apoyados esas personas, explicó la entrevistada.
“Hablando de mi comunidad sabemos que no son muchas personas, son muy pocas las que se dedican a esto, como unas cuatro o cinco que compran (la madera), otras 10 familias que venden. Aquí la situación también es que a veces las autoridades comunales no se forjan los pantalones y se ponen a detener esa situación”.
A lo anterior agregó: “En nuestra comunidad el año pasado hicimos un movimiento donde tratamos de detener esta tasa clandestina, sin embargo no nos resultó porque las autoridades daban sus permisos y nuestras barricadas no servían de nada. Ya va de salida la autoridad comunal que es representada por el señor Lorenzo González Reyes y Antonio Avilés Felipe”.
Aunado a lo anterior, explicó Ángeles González Ramos, también se encuentran las trabas gubernamentales a las que se enfrentan para poder acceder a los recursos en materia ambiental.
“Les he comentado a los integrantes del Consejo Forestal en Michoacán que uno de los obstáculos o de los bloqueos que nos hacen para acceder a los programas que son de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), es la carpeta básica que nos piden, la mayoría de las comunidades indígenas no las tenemos, que en ella se solicita el acta de nacimiento de la comunidad”.
Al no contar con ella, no pueden acceder a los programas de apoyo, comentó, Ángeles González Ramos.
“Y prácticamente ya no podemos hacer nada y beneficiarnos de ningún programa y hacer las acciones. Aunque claro que las estamos haciendo para defender, como las reforestaciones. El año pasado fuimos beneficiados con 120 mil pinos en Comachuén asignadas por la Comisión Nacional de Áreas Naturales y fue gestión que hicimos nosotros”.
Finalmente lamentó el poco interés que existe en las autoridades por colaborar a combatir el cambio climático y abonar a las acciones con las que se podría ayudar a la naturaleza.
“Lamentablemente el gobierno habla mucho y hace poco, ejemplo de ello es cómo nos bloquean para acceder a los programas, ahí se dice todo. Aunque genera y diseña buenos programas, nos bloquean”, concluyó Ángeles González Ramos, habitante de la comunidad indígena de Comachuén, e integrante del Consejo Forestal de Michoacán, dónde representa a las comunidades indígenas de toda la entidad.