Morelia, Michoacán.- En un rincón olvidado de la historia surge George Jorgensen, un joven estadounidense que viajó a Dinamarca para someterse a una serie de operaciones que lo transformarían en Christine Jorgensen, la primera persona en cambiar de sexo legalmente.
Hace 71 años, el 1 de diciembre de 1952, se dio a conocer la noticia de una operación pionera para cambiar de sexo, la cual incluyó tanto una intervención quirúrgica como una terapia hormonal.
De acuerdo a la biografía oficial de Christine Jorgensen, publicada por ella misma en 1967 bajo el título "Christine Jorgensen: A Personal Autobiography".
Christine Jorgensen nació en el Bronx, Nueva York, el 30 de mayo de 1926, como George William Jorgensen Jr. Desde pequeño se sintió diferente a los demás niños y se identificó con el género femenino. Durante la Segunda Guerra Mundial sirvió como fotógrafo en el ejército, pero no se sentía cómodo con su cuerpo ni con su rol social.
Asimismo, referente a su autobiografía se comenta que en 1950, tras leer un artículo sobre el cambio de sexo de una mujer danesa, decidió viajar a Copenhague para consultar al doctor Christian Hamburger, un endocrinólogo especializado en transexualidad. Allí inició un tratamiento hormonal y se sometió a varias cirugías para modificar sus genitales, sus pechos y su rostro.
El 1 de diciembre de 1952, George Jorgensen obtuvo su nuevo pasaporte como Christine Jorgensen y regresó a Estados Unidos, donde su historia se hizo pública y causó una gran conmoción.
Después de ello, Christine se convirtió en una celebridad y aprovechó su fama para dar conferencias, escribir un libro y participar en películas y programas de televisión. También se dedicó a la defensa de los derechos de las personas transgénero y se convirtió en un símbolo de la diversidad sexual.
Christine Jorgensen murió de cáncer el 3 de mayo de 1989, a los 62 años, dejando un legado histórico y social que inspiró a muchas otras personas a seguir su ejemplo y a reivindicar su identidad.