Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Actualmente es más común permitir a los niños que utilicen los dispositivos móviles de manera habitual, sin embargo, esto tiene diversos efectos negativos en la salud de los niños, por la luz que desprenden las pantallas.
Durante mucho tiempo, los expertos han realizado diversos estudios para comprender, qué efectos negativos produce la luz azul que desprende las pantallas móviles y han descubierto que esta exposición puede tener efectos perjudiciales en el bienestar de las personas, no obstante, la preocupación está más en los pequeños.
La luz azul que emiten los dispositivos móviles, como teléfonos y tabletas, son identificadas como una de las principales causas en no permitir que los niños concilien el sueño y afectar a su calidad de descanso, debido a la luz que desprende los dispositivos. Esto puede afectar la salud general de los niños, su rendimiento académico y su bienestar emocional.
Asimismo, la fatiga visual es otro efecto común de la exposición prolongada a las pantallas, manifestándose a través de síntomas como sequedad ocular, picazón, enrojecimiento y dolores de cabeza. Además, de aumentar el riesgo de miopía, entre otros problemas de visión.
Por otro lado, los dispositivos pueden provocar problemas de atención en los niños, teniendo un impacto en su desarrollo cognitivo y en su habilidad para mantener el enfoque en tareas relevantes. Como también aumentar los niveles de estrés y de intolerancia. Igualmente, un retraso en el desarrollo físico, cognitivo y social por la sobreexposición a los dispositivos.
¿Cómo evitar estos riesgos por la luz azul?
Lo que se recomienda es establecer límites a los niños del tiempo para su uso de los dispositivos móviles, especialmente antes de acostarse. Asimismo, utilizar filtros de luz azul en las pantallas y fomentar actividades alternativas, como el juego al aire libre y la lectura de libros, esto puede ayudar a contrarrestar estos efectos negativos.
Además, es importante que los padres desempeñen un papel activo en el cuidado y supervisión del uso de dispositivos móviles por parte de sus hijos. Es fundamental tener reglas claras, promover hábitos saludables y fomentar el equilibrio entre el tiempo de pantalla y otras actividades para proteger el bienestar de los niños en la era digital.