Morelia, Michoacán.- El cáncer bucal es una enfermedad grave que afecta a miles de personas cada año. El tabaco es uno de los principales factores de riesgo, pero no el único. ¿Existe una forma de fumar que reduzca el peligro de desarrollar este tipo de cáncer? De acuerdo a una investigación científica, la respuesta es sí, pero con matices.
Según la American Society of Clinical Oncology, se estima que en 2020 se diagnosticaron cáncer oral y orofaríngeo a 476 mil 125 personas a nivel mundial. Igualmente, el cáncer oral y orofaríngeo son el octavo cáncer más frecuente en los hombres.
Fumar correctamente para evitar cáncer oral
Los fumadores que utilizan filtros o boquillas reducen en un 50% el riesgo de cáncer bucal en comparación con los que fuman directamente del cigarrillo, según un estudio publicado en la revista Oral Oncology. Esto se debe a que las boquillas o filtros reducen la cantidad de alquitrán y otras sustancias peligrosas que entran en contacto con la mucosa oral. No obstante, esto no implica que sea seguro fumar ni que se pueda hacer sin moderación.
El estudio también señala que el riesgo de cáncer bucal aumenta con el número de cigarrillos consumidos al día y con la duración del hábito tabáquico. Además, hay otros factores que influyen en el desarrollo de esta enfermedad, como el consumo de alcohol, la mala higiene bucal o la exposición al virus del papiloma humano (VPH).
Asimismo, según un estudio publicado por Tobacco Control, la exposición al humo del tabaco de los fumadores pasivos puede aumentar en más del 50% el riesgo de desarrollar cáncer oral en los labios, la boca y la garganta. Además, las personas de 10 a 15 años que son fumadoras pasivas pueden tener el doble de probabilidades de desarrollar algún tipo de cáncer oral.
Por lo tanto, la mejor manera de prevenir el cáncer bucal es dejar de fumar o, al menos, reducir al mínimo el consumo de cigarrillos. También es importante evitar el consumo excesivo de alcohol, visitar regularmente al dentista y cepillarse los dientes después de cada comida. Por consiguiente, se puede disfrutar de una boca sana y sin cáncer.
