Morelia, Michoacán.- En un mundo tan ajetreado es cada vez más difícil dormir y descansar adecuadamente, por eso te presentamos cinco tips para conciliar el sueño más rápido.
Respira profundamente
La técnica más simple es respirar más lento. El profesor Ian Robertson del Trinity College de Dublín aseguró que al respirando lenta y profundamente. De esta manera, el oxígeno a la parte trasera del cerebro conocida como locus coeruleus.
El locus coeruleus mantiene activo el cerebro, si no puedes relajarte es porque esta parte está produciendo la hormona noradrenalina, la sustancia que mantiene despierto el organismo.
Usa la regla 4-2-4: inhala durante cuatro segundos, mantén la respiración por dos segundos y exhala durante cuatro segundos. Procura no levantar los hombros cuando respires. Para que sepas que estás haciendo correctamente el ejercicio, pon una mano sobre tu pecho y otra sobre el abdomen. Debes sentir cómo levanta la mano que tienes sobre el abdomen y ligeramente la del pecho.
Levántate temprano
Estudios recientes han arrojando que la hora a la que te despiertas tiene más peso en tu reloj biológico que a la que te duermes. Esto se debe a los efectos de la luz del día.
Cuando la luz llega al ojo, estimula los receptores en la parte posterior del mismo que detecta la luz y envían señales a una región del cerebro llamada núcleo supraquiasmático.
La luz detiene la producción de la hormona del sueño, la melatonina y activa el organismo para comenzar el día.
Haz de tu cama tu lugar de descanso
Es común que estamos acostados y decidimos dar una revisión rápida al teléfono. Además que interrumpimos la producción de la melatonina, nuestro cerebro asocia la cama como un lugar de recreación, no para descansar.
Si no tienes sueño, párate y haz algo para cansarte un poco, después regresa a la cama y duerme. Estudios realizado por la Universidad Metropolitana de Toronto esta terapia es efectiva y se ven resultados al cabo de unas semanas, además de que los efectos son duraderos.
Báñate antes de dormir
Un baño con agua tibia antes de dormir puede ayudar a conciliar el sueño más rápido. Estudios recientes indican que las personas que tomaron una ducha antes de acostarse durmieron 36% más rápido, tuvieron mejor calidad de sueño y se sintieron más descansados al día siguiente.
Al calentar ciertas partes del cuerpo, como manos y pies, los vasos sanguíneos que irradian calor comienzan a dilatarse, lo cual lanza más sangre a la superficie de la piel que ayuda a acelerar la pérdida de calor. Esto sirve para disminuir la temperatura central y actúa como señal para dormir.
Duerme lo necesario
Se dice que una persona debe dormir ocho horas diarias. No obstante, esta meta resulta imposible y para algunas personas hasta estresante pues no puede cumplir con esas hora de descanso. El cuerpo también pide descanso y dice cuándo es suficiente dormir.
Hay personas que con cuatro horas de sueño es suficiente, es por ello que invitan a escuchar a su cuerpo y dormir hasta no poder más.