Morelia, Mich (OEM/Infomex).- El inicio de la cuaresma implica para muchas personas, sobre todo de la religión católica, un cambio de dieta que va desde la elaboración de platillos tradicionales de la temporada como la capirotada, las sopa de habas y los nopales en sus diferentes presentaciones hasta el cambio de proteína, evitando las carnes rojas e inclinándose por pescados y mariscos.

Sin embargo, las nuevas reglas dictadas por la iglesia y el aumento en los precios de diferentes productos han empezado a marcar cambios significativos.

Don Checo, carnicero establecido en el mercado Revolución, mejor conocido como San Juan, dio a conocer que todos los expendedores de carne de res y cerdo cierran sus establecimientos los viernes, considerados de ayuno durante los 40 días previos a Semana Santa.

“Aunque la iglesia ya acepta el consumo de carne roja, mucha gente toma a mal que uno no respete los viernes de cuaresma y por eso preferimos cerrar, igual que los taqueros y los hamburgueseros”, afirma.

De cualquier forma y para evitar pérdidas, algunos vendedores de tacos o hamburguesas han optado por ofrecer menús veganos a sus clientes sustituyendo esos días la carne de res, el chorizo y el tocino en sus preparaciones por champiñones, lentejas u otras preparaciones.

“No es lo mismo, la gente está acostumbrada al sabor de la carne con las cebollitas y su salsa y no quieren cambiar”, confesó Juan, un famoso taquero de la ciudad quien de plano, señaló que él prefiere no abrir su puesto los días de cuaresma.

Los menús tradicionales de estas fechas incluyen como base proteínica el pescado, pero la baja cultura de consumo de productos acuícolas así como su precio mantienen en crisis a los vendedores de estos productos.

María, dueña de un puesto en el mercado de San Juan, señaló que sus previsiones de venta para estos días son iguales a las del resto del año.

“No hemos previsto surtirnos más porque las ventas han sido muy malas y no creemos que vayan a mejorar”, mencionó.

Dijo que los productos que más se venden son la mojarra cuyo precio es de 120 pesos por kilo; el camarón que está a 200 y el filete de pescado que se vende a 180.

“Nuestra única esperanza es que para el Jueves y Viernes Santo la situación mejore (en cuanto a ventas) pero con eso de que la Iglesia ya consiente que se coma carne roja, pues la gente la prefiere y sólo respetan la cuaresma las personas mayores”, asegura.

La situación no es mejor para los vendedores de verdura, quienes aunque reconocen que la demanda de productos como la papa, la coliflor y los chiles poblanos aumenta, también es cierto que las personas compran solo lo justo.

“Es que aumenta la demanda pero también aumenta el precio, por ejemplo la papa de estar en 28 (el kilo) ahora está en 32 y el chile poblano de venderse en 28 ahora cuesta 35 y aunque la gente piensa que uno es quien lo sube, pero lo que pasa es que uno lo compra más caro también”, justificó.

Canasta básica

El pollo, huevo, jitomate, azúcar y frijol presentaron durante la última semana un aumento significativo en el precio, ocasionando una variación en el costo de los diez productos básicos analizados de diez pesos promedio.

El producto que mayor aumento registró fue el jitomate que prácticamente duplicó su precio al pasar de 12 a 26, mientras que el pollo se incrementó cinco pesos y el huevo, dependiendo del lugar donde se adquiera puede llegar a los 52 pesos por kilogramo.

La tortilla y el bolillo, siguen siendo los productos con precio más estable en lo que va del año ya que ninguno de los dos ha registrado variaciones.