Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El gazpacho, es un exquisito cóctel de fruta picada que ha conquistado los paladares de los morelianos y a todo turista que se atreve a probar este delicioso manjar. La preparación del gaspacho es un arte que requiere atención meticulosa y pasión por los sabores. Y aquí te decimos cómo prepararlo.
Hoy 18 de mayo se conmemora el 482 aniversario de la fundación de la ciudad de Valladolid, hoy Morelia. Fue fundada el 18 de mayo de 1541 en el valle de Guayangareo, por disposición del Virrey Don Antonio de Mendoza y a instancia de varios españoles avecindados en Michoacán. Asimismo, hoy damos valor a su gastronomía con el delicioso gaspacho moreliano.
La historia del gazpacho se remonta a 47 años, cuando en 1976 José Alfredo Ferrer Ortiz en un día de tragos realizó una mezcla para su resaca en su puesto de frutas ubicado en el Bosque Cuauhtémoc de la ciudad, en este momento unos transeúntes pasaban, por lo que al ver, pidieron probarlo y les gusto. Desde este momento surgió el gazpacho moreliano.
El manjar moreliano es una mezcla única de sabores frescos y coloridos. El cóctel se elabora a base de una amplia variedad de frutas picadas, como sandía, melón, mango, piña, jícama y naranja, que se adereza con jugo de limón, chile en polvo y un toque de sal. Esta combinación crea una experiencia sensorial inigualable.
Para preparar el auténtico gaspacho, se necesita una variedad de frutas, las más utilizadas se encuentran la sandía, el melón, el mango, la piña, la jícama y la naranja. Una vez que las frutas están listas, se procede a pelarlas y cortarlas en trozos pequeños. La técnica de corte puede variar según la preferencia personal, algunos optan por cubos pequeños.
Una vez picadas, las frutas se mezclan en un recipiente grande y se agrega el toque distintivo del gaspacho: el jugo de limón fresco, la cebolla, el chile verde, el vinagre. Asimismo, se le añade una pizca de chile de polvo y queso dándole un toque especial que disgustará tu paladar.
El último paso es agregar una pizca de sal, la cual ayuda a equilibrar los sabores y realzar el sabor natural de las frutas. Una vez que todos los componentes están en el recipiente, se mezclan suavemente para asegurar que todos los sabores se integren de manera armoniosa.
El gaspacho moreliano se sirve en vasos altos. Cada sorbo de este cóctel es una explosión de sabores tropicales que deleita los sentidos y refresca el paladar, convirtiéndolo en la elección perfecta para los días calurosos y soleados en la ciudad.
En la preparación del gaspacho cada paso es importante para conseguir la mezcla perfecta. Así que la próxima vez que degustes un vaso de este manjar recuerda que detrás de su refrescante sabor se esconde un proceso cuidadoso y tradicional que ha conquistado los corazones de los amantes de la buena comida en la bella Morelia.
