Morelia, Michoacán. (OEM- Infomex).- Al cierre de 2019, Michoacán recibió tres mil 584.4 millones de dólares por concepto de remesas familiares, provenientes de migrantes radicados –legal e ilegalmente- en los Estados Unidos.
El reporte del Banco de México (Banxico) denominado: Ingreso por Remesas, Distribución de Remesas por Entidad Federativa, señala que Michoacán aportó el 9.1 por ciento a nivel nacional de la captación total de este recurso, que representa una ligera disminución comparativamente con el año 2018, en donde el porcentaje fue de 10.1 por ciento.
En 2018, el estado registró la captación de divisas por el orden de tres mil 405.7 millones de dólares, respecto al monto captado el año anterior representa un incremento de 5 por ciento.
Los 10 municipios con mayor captación de remesas durante el mismo período son: Morelia, La Piedad, Uruapan, Zamora, Apatzingán, Puruándiro, Hidalgo, Pátzcuaro y Huetamo.
Los municipios de menor captación de remesas migrantes son: Briseñas, Charo, Chucándiro, Irimbo, Tzitzio, Madero, Nahuatzen y San Lucas, un promedio de 60 mil hasta 500 mil dólares trimestrales.
Los dólares que llegan a las familias michoacanas, lo utilizan para satisfacer necesidades primarias como son alimentación, vestido, salud y educación.
El gobernador del estado, Silvano Aureoles Conejo, en todas sus campañas políticas que ha hecho para acceder a puestos públicos ha ofrecido atender al sector migrante creándoles un banco o institución financiera para amortiguar los costos de envío de dinero.
A la fecha y tras cuatro años de gobierno el tema del banco migrante es aún un tema pendiente, entre otros factores porque la ley no permite la creación de una institución bancaria y no se cuenta con recurso presupuestal.
“Para crear una institución bancaria se requerirán de mínimo 600 millones de pesos”, reconoció el secretario del Migrante, José Luis Gutiérrez Pérez.
Michoacán es un estado con más de cuatro millones de ciudadanos radicados en los Estados Unidos, quienes contribuyen a la economía y colocan al estado como líder en la captación de divisas, por encima de Guerrero y Zacatecas.
El titular de la Semigrante enfatizó que el banco del migrante “es un pendiente de la administración que busca una estrategia financiera para apoyar la inversión y abaratar los costos de las remesas”.
Sin embargo, dijo, ello implicaría crear un fideicomiso para tener institución bancaria para tener forma de operar”.
En 2015, como aspirante al gobierno de Michoacán, Aureoles Conejo planteó la creación de un esquema financiero para la captación de remesas que fuera seguro, en donde se quedaría como un ahorro un porcentaje de los envíos (25 por ciento) y servirían para futuras inversiones o impulso de proyectos productivos.
El proyecto del gobierno estatal se quedó sin viabilidad desde 2016 y 2017, pero en el año 2018 el mandatario reiteró la propuesta.
El secretario de Finanzas en el estado, Carlos Maldonado Mendoza, reiteró que no se puede constituir un banco estatal porque “es un marco normativo complejo, pero reconoció que “no será posible crearlo en lo que resta de la administración”.
Alternativas
José Luis Gutiérrez Pérez dio a conocer que en el Sistema de Financiamiento para el Desarrollo de Michoacán (Sí Financia) la dependencia “tiene un aliado para el otorgamiento de créditos para los paisanos”.
Y recientemente en los Centros de Escucha de la Arquidiócesis de Morelia, anunció, se pretende atender a los migrantes en retorno o deportados que regresan en condiciones de vulnerabilidad.
En este sentido, el funcionario señaló que “por su estancia de 20 a 30 años allá, los migrantes llegan deprimidos porque dejaron a su esposa e hijos; otros retornan con problemas de drogas o tienen que lidiar con estereotipos y prejuicios, con etiquetas que se les ponen por su forma de hablar o vestir”.
En el último año, se han atendido a mil migrantes en temas de asesoría, capacitación y acompañamiento a través del módulo de Semigrante.
Con el inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, programas como 3x1 y Fondo Migrante quedaron suspendidos; “no hay una política pública federal integral para atender el tema migratorio en México”, ante ello, se instrumentaron programas estatales para atender a este sector.
En 2016, del programa 3x1 se destinaron a Michoacán 22 millones de pesos por conducto de la extinta Secretaría de Desarrollo Social; en 2018, con retrasos se proyectaron 24 millones de pesos, que con aportaciones de municipios, estado y beneficiarios, se elevó a poco menos de 100 millones de pesos en 140 obras de infraestructura urbana y de servicios básicos.
En 2019 se reportaron 17 mil michoacanos deportados, de ellos, el cinco por ciento de los repatriados intentan nuevamente cruzar la frontera; Semigrante estima que en Michoacán un 20 por ciento de familias reciben remesas.