Morelia, Michoacán (OEM Infomex).- Por más de cinco años las vacunas de sarampión y rubéola se encuentran agotadas en las clínicas de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM), por eso son negadas en los módulos de aplicación, principalmente para los menores que requieren refuerzos, denunció la madre de tres hijos, Norma Galindo Murillo.
La madre de familia denunció que desde 2014 debía haber vacunado de sarampión y rubéola a sus hijos, pero fue hasta 2020 que logró la aplicación para su hija mayor.
A su hija le tocaba la vacunación de sarampión y rubéola en 2014, es decir, cuando la niña cumpliera 12 años, sin embargo, fue hasta los 18 que recibió la dosis, gracias a que su madre estuvo al pendiente.
Lo mismo le pasó con su hijo, quien tiene 16 años de edad y le aplicaron la vacuna cuatro años después de que le tocaba, según la cartilla de vacunación que mostró Norma Galindo, quien se dijo preocupada porque su hijo de dos años no ha sido vacunado.
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“No tengo seguro social y por eso tengo que acudir al sistema de salud público, me preocupa que no pueda ponerle los refuerzos a mi hijo pequeño”, mencionó.
La Organización Mundial de Salud (OMS) advirtió en el mes de julio del presente año, que, con la alteración de los servicios de inmunización, incluso por períodos breves, puede provocar el incremento de número de personas susceptibles.
Según la OMS, México dejó de vacunar a los menores de edad por la pandemia de Covid-19, por lo cual hay riesgo de brotes de esas enfermedades que pueden provocar un aumento de mortalidad y morbilidad, principalmente entre lactantes y otros grupos vulnerables, lo que supondría una mayor carga sobre los sistemas de salud.
El organismo mundial refiere que por lo menos 80 millones de niños menores de un año corren el riesgo de contraer enfermedades como difteria, sarampión y poliomielitis por la interrupción de las vacunas, muchos de los casos por el miedo que existe de las madres en acudir a los hospitales y centros de salud debido al riesgo latente de contagio de Covid-19 y otros por la falta de dosis en el sistema público de salud.