Morelia, Mich. (OEM-Infomex).- Por la devastación de los mantos acuíferos en la periferia de la ciudad, la ciudad de Morelia podría quedarse sin abasto de agua potable en 10 años, aseguró el director general del Organismo Operador de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS), Julio César Orantes Ávalos.
En entrevista para El Sol de Morelia, el funcionario declaró que cada vez es más complejo para el organismo llevar el servicio de agua de manera regular a los 260 mil usuarios a los que abastece la paramunicipal, pronosticando un futuro incierto para el servicio de agua potable en la próxima década.
“Es una realidad que llegará un punto en el que el municipio no tendrá agua potable, yo estimo que entre 10 y 15 años podríamos estar en una situación bastante crítica”, dijo.
Las causas de la posible falta de agua potable en el municipio son varias, entre ellas, se encuentra la pérdida de fuentes subterráneas y mantos acuíferos que solían abastecer la ciudad, tal es el caso del manantial de La Mintzita, el cual año con año va a perdiendo metros de profundidad debido a las sequías y mal uso.
Eliseo Barrera Mejía, miembro de la Comunidad Ecológica Jardines de La Mintzita, señaló que el manantial ha perdido el 30 por ciento de su capacidad en un período no mayor a los 20 años, sin embargo según estudios ambientales realizados por la Comunidad, estiman que La Mintzita enfrente un punto crítico de sequía en alrededor de siete años.
Nosotros hacemos estudios de la calidad del agua de manera constante, estamos monitoreando, pero las deforestaciones, así como el tiradero de residuos contaminantes al manantial, merman la calidad del agua y a nadie parece importarle
El activista ambiental apuntó que derivado de la tala de árboles, se han instalado huertas de aguacates y otros frutos, cerca del manantial, así como asentamientos humanos que, de una u otra manera, contaminan el agua y hacen uso inadecuado del recurso.
Por su parte el director del OOAPAS aseguró que en la presa de Cointzio siguen habiendo descargas de aguas residuales y contaminantes agroquímicos por las huertas de aguacates y berries, que a su vez merman la calidad de los hídricos del municipio.
Una posible solución a ello, es buscar agua a mayor profundidad, sin embargo, esto representa un costo extra para la paramunicipal, recurso que no se tiene, ni se puede conseguir, refirió.
Ahora que, si a esto se le se suma, pésimas condiciones, reportando un 40 por ciento de fugas por cada 100 litros distribuidos, el obtener agua potable en un futuro podría ser una tarea titánica para los morelianos, reveló