Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Luego de la muerte del joven Julio H., de 27 años, a manos de policías de Morelia, más dudas que respuestas concretas prevalecen en el caso y, sobre todo, se impone una sentida exigencia entre su familia, amigos y vecinos para que el hecho se esclarezca a la brevedad.
La versión oficial, la que emitió anoche la Policía de Morelia en sus redes sociales, apunta a que Julio ingresó a robar a un domicilio del fraccionamiento Jardines del Toreo. La comisionada de Seguridad, Julisa Suárez Bucio, afirmó que los agentes intervinieron debido a que hubo un reporte por parte de un vecino.
Suárez Bucio explicó que el joven se tornó agresivo y como resultado de la actuación policial, falleció de un disparo. Sin proporcionar mayores detalles de cómo ocurrieron los hechos, dijo que un elemento resultó lesionado.
La funcionaria aseguró que los oficiales actuaron de acuerdo a los protocolos y a la valoración de las circunstancias.
La comisionada señaló que la información que recibió es que se trataba de un hombre agresivo, por lo que la Policía debió actuar de acuerdo a sus facultades para proteger a las personas que se encontraban en el domicilio.
Sin embargo, la versión oficial difiere de la de los testigos y la familia de Julio, quien supuestamente sufría una discapacidad intelectual. Acusan que se trata de un caso de abuso policiaco.
En redes sociales se asegura que el muchacho estaba perdido dentro del fraccionamiento y que por error entró a una casa ajena. Fue entonces que los dueños del lugar notificaron a los vigilantes quienes acudieron a atender la situación.
Testigos aseguran que Julio tuvo un ataque de ansiedad al intentar brincar por la cochera, por lo que los propietarios de la casa y los guardias intentaron auxiliarlo a petición del padre del joven, quien lo buscaba desde hacía unas horas.
En ese momento llegaron los policías que comenzaron a gritarle, lo que detonó que la crisis de Julio empeorara e intentara correr. Fue en ese instante que un elemento le disparó y le causó la muerte.
En un comunicado, la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE) informó que abrió una carpeta de investigación en torno al caso. Indicó que un elemento de la policía municipal resultó herido con un arma punzocortante, por lo que fue canalizado a un hospital para su atención. Sin embargo, el documento no detalla la manera, las circunstancias ni quién fue el responsable de lesionar al oficial.
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Por su parte, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) inició una investigación del caso y exhortó a las autoridades de seguridad pública para que actúen en estricto apego a la ley y respeto a los derechos humanos.
En un comunicado, el organismo informó que el encargado del Despacho de la Presidencia, Uble Mejía Mora, instruyó al coordinador de Orientación Legal Quejas y Seguimiento, Ángel Botello Ortiz, iniciar el expediente de queja y realizar las diligencias por posibles violaciones a los derechos humanos de Julio H. por parte de los policías involucrados.
En su perfil de Facebook, Osmara Chagoya, hermana de Julio, publicó un mensaje en el que exige justicia. Asegura que el joven no estaba armado y que su padre pidió a los oficiales que no le dispararan.
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“Vecinos e incluso vigilantes del fraccionamiento donde mi familia hemos vivido toda nuestra vida lo conocían y sabían que no era peligroso ni estaba lastimando a nadie!!!!! Mi papá pidió que no se disparara, los vigilantes le hicieron saber al policía que le quitó la vida a mi hermano que no estaba haciendo nada malo, fue una confusión y estaban tratando de tranquilizar la situación. Mi papá vio morir a mi hermano a mano de un asesino a sangre fría...”, explica Osmara en la red social.
En otra publicación replicada por Osmara, Jorge Octavio Hurtado González, vecino de la familia, aseguró que Julio padecía una depresión profunda.
En tono de indignación, repudió la falta de capacitación y el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía que cobraron la vida de Julio y dejaron destrozada a su familia, acusó.
