MORELIA, Michoacán.-(OEM-Infomex).- Pese a la presencia de lluvias en las últimas semanas en Michoacán y el país, la sequía registrada durante los meses de junio, julio y parte de agosto trajo afectaciones severas en más de 66 mil hectáreas de cultivos anuales de maíz, frijol y sorgo, principalmente, informó el secretario de Desarrollo Rural y Agroalimentario (Sedrua), Rubén Medina Niño.
Daños a la superficie agrícola que se acentuaron en la Tierra Caliente, en municipios como Huetamo, Churumuco, Apatzingán, Carácuaro, La Huacana, San Lucas, Tiquicheo, y de otras regiones como en La Piedad; dimensión de los siniestros en cultivos que para este 2019 incrementó hasta en un 20 por ciento más, en comparación al año anterior.
Si bien el 2016 fue uno de los años más secos en la última década, Medina Niño precisó que el 2019 ha tenido similitud ante la presencia del fenómeno “El Niño”, no descartándose que para la próxima temporada de invierno el número de hectáreas afectadas alcance las 70 mil, de ahí que proyecten establecer un programa de apoyo a productores.
“Este también es un año seco, tiene la incidencia del fenómeno del Niño, estamos también buscando cómo podemos mitigar el impacto de la sequía, porque no sólo es un problema de Michoacán, también de otras entidades como Chiapas, Veracruz y Tabasco (…) encontramos cultivos desarrollados, desde el punto de vista fisiológico, pero no tuvieron producción, se quedaron a nivel vegetativo”, indicó.
No obstante, y pese a la época de estiaje, el titular de la Sedrua reconoció que la zona aguacatera fue mínima la sequía, toda vez que con las recientes lluvias los mantos freáticos volvieron a recargarse y no generaron ningún tipo de afectación al cultivo perene del fruto verde.
Finalmente, informó que la Sedrua estaría en condiciones de destinar cerca de 75 millones de pesos como apoyo para los agricultores afectados, pero únicamente alcanzarían cubrir alrededor de 20 mil hectáreas de superficie, por lo que estarían en búsqueda de concurrir con la Federación en más recursos para que el resarcimiento de daños sea integral para los productores afectados.