Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Durante su visita a Morelia este viernes, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador dejó claro que seguirá con su política de “abrazos y no balazos” para pacificar a la entidad. En la 21 Zona Militar, donde brindó su conferencia mañanera, evadió dar una postura sobre el posible desarme de las autodefensas que resurgieron en diferentes regiones y culpó de la presencia del crimen organizado al sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.
Pienso que fue un error lo de las autodefensas, porque el Estado mexicano está obligado a garantizar la seguridad de las personas y, cuando no, hay que procurar demandar a las autoridades”, refirió.
Señaló principalmente al gobierno del michoacano Felipe Calderón, a quien le recriminó el haber iniciado una guerra contra el narcotráfico que, a su parecer, trajo consigo consecuencias que se siguen viendo reflejadas en la crisis de seguridad que enfrenta la entidad.
Las declaraciones del presidente respondieron a una serie de cuestionamientos motivados por las advertencias que emitió hace apenas unas semanas el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, quien dijo que, en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se procedería al desarme de las autodefensas que se han comenzado a reagrupar en Tierra Caliente y otras regiones como el occidente y el oriente.