Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- En los últimos meses los baños de la Casa de la Cultura de Morelia funcionaron entre malos olores, sin papel higiénico, jabón, sin agua e incluso como sanitarios públicos, a pesar de ser usados por estudiantes y docentes, informó el director de Educación y Formación de la Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum), Asdrúbal Ramírez Carrillo.
Indicó que los sanitarios recién remodelados son los que están en la parte trasera del centro cultural, donde se localiza el Teatro al Aire Libre, que durante la pandemia se utilizaron como bodega, a los cuales ahora la Dirección de Patrimonio, Protección y Conservación de Monumentos y Sitios Históricos de la Secum les da mantenimiento integral.
Explicó que esa instancia encargada del mantenimiento y restauración de los inmuebles de la Secum ahora rehabilita los baños que están a las afueras del Ágora. Detalló que el de mujeres está terminado y actualmente se remodela el de los hombres, por lo que se espera que para el festival Morelia en Boca queden listos; en estos sanitarios el problema era el sistema hidráulico obsoleto y que la porcelana que se usaba no era la adecuada, anotó Ramírez Carrillo.
Agregó que la placa de la cloaca estaba muy deteriorada, a las bombas se les puso mayor presión para que haya agua, independientemente si están o no encendidas. Antes las fallas solo se solucionaban superficialmente, incluso algunas rehabilitaciones fueron hechizas, se utilizaban tapas de botellas de agua para algunas cosas, por lo que no duraban.
Destacó que uno de los mayores problemas en los sanitarios era que los turistas llegaban a hacer mal uso de ellos; aproximadamente 500 personas ajenas a la Casa de la Cultura accedían a ellos. Ahora hay mil 900 alumnos en los talleres, lo cual ya de por sí genera un uso intenso en los baños.
Comentó que se comenzó a regular el ingreso de personas externas y a los estudiantes se les creó conciencia en el cuidado de los sanitarios. Apuntó que se tomaron estas medidas porque a la entrada las personas decían que iban al baño y, aunque es un edificio público y pueden entrar todos, también se deben cuidar por el tema de la higiene, sostuvo.
Dijo que también hubo robos hormiga, por lo que se decidió poner un filtro a la entrada y no permitir el ingreso a quienes solo podían empeorar la situación.
Finalmente, señaló que se habló con el alumnado para que esto se detuviera y que supieran que mantener los baños también es su responsabilidad.