Pátzcuaro, Michoacán (OEM-Infomex).- La participación de las mujeres en las comunidades indígenas ha crecido, no obstante, la representación política en los gobiernos de usos y costumbres sigo siendo acaparado por los varones, reconocieron las participantes del Primer Encuentro de Mujeres Indígenas convocado por el Instituto Electoral de Michoacán (IEM) en la ciudad de Pátzcuaro.
Las más de 160 mujeres que participaron en el foro subrayaron que ya forman parte de órganos gubernamentales, aunque con cargos considerados menores: “Nos dejan algunas áreas de deportes, de cultura, sin que podamos acceder a otras áreas”, dijo la indígena Dulce Torres.
El primer encuentro suscitado en las instalaciones del Organismo internacional especializado en el desarrollo de modelos y propuestas para el aprendizaje a lo largo de la vida y la educación (Crefal) de Pátzcuaro, sorprendió a las propias autoridades electorales, pues la actividad trajo a colación en las mesas de trabajo historias de abusos físicos, psicológicos, monetarios y de abandono si las mujeres decidían participar en la vida pública.
“Mi esposo me dejó de hablar cuando decidí aventarme por un cargo. Primero me sacó del cuarto donde dormíamos; luego al querer regresar, me dio a escoger que si el cargo o él, que así no podíamos seguir”, relató una de las participantes durante el desarrollo de las siete mesas de trabajo que durante dos horas aportaron diversas historias.
La petición al órgano electoral fue “no soltarlas”, seguir convocándolas a otras mesas de trabajo, a talleres, a capacitarlas para en lo posible incidir con mejores herramientas en la vida pública de sus lugares de origen.
“El empoderamiento se dio entre todas las coincidencias de vida”, indicó la consejera presidenta de la Comisión para la Atención de Pueblos Indígenas, Araceli Gutiérrez Cortés. En entrevista, añadió que las mujeres indígenas son aguerridas, toda vez que sus entornos las han obligado a endurecerse.
El encuentro que las participantes tuvieron con la diputada federal de Oaxaca, Eufrosina Cruz Mendoza, generó una euforia en las comuneras. La identificación que se dio con la diputada indígena, la rebelde que ha venido demostrando, como ella misma lo mencionó, que una “pinche india también razona y piensa” dio la oportunidad de observar cómo se pueden romper los paradigmas a los que ellas se enfrentan.
“Lo importante es generar un cambio en las comunidades sin trastocar sus usos y costumbres, sin que ello radique en una injerencia negativa por parte de una institución como el IEM”, resaltó Gutiérrez Cortés.
El encuentro representó que muchas de ellas reconocieran que viven en entornos violentos. En este sentido, el órgano electoral planea llevar a cabo talleres regionales de manera presencial, como se los solicitaron.
Durante el mensaje inaugural a cargo de la diputada local Eréndira Isauro Hernández, la discriminación al que se enfrentan las mujeres indígenas fue el tema principal. La legisladora relató a las autoridades electorales que cuando acudió a las instalaciones del IEM para entregar su documentación para participar en el proceso electoral fue discriminada por el personal.
“Uno de los retos que deben de darse en torno a la participación de las mujeres en la vida pública es erradicar la discriminación”, mencionó.
El simple hecho de vestir de manera tradicional y hablar una lengua indígena le trajo consigo tales detracciones. La representante por el Distrito 05 con cabecera en Paracho dijo desconocer si su traje tradicional, el color de su piel o el ser abanderada por Morena fue la causa del desaire, mismo que cambió luego de asumir un puesto en funciones.
Pero no solo en el IEM sufrió discriminación, contó en entrevista. También cuando acudió a tomar protesta como congresista local, los guardias del Poder Legislativo le impidieron el paso. Su traje tradicional le marginó el ingreso hasta que mencionó que era diputada.
En el foro participaron mujeres de Arantepacua, Comachuén, San Francisco Pichátaro, Santa Cruz Tanaco, Teremendo de los Reyes, Turícuaro, Santiago Azajo, Huáncito, Santa Fe de la Laguna, Sevina, Capacuaro, San Lorenzo y Cherán.