Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Integrantes del colectivo Mapas exigieron que el sistema de justicia aplique criterios con perspectiva de género en el caso de Xitlali Ballesteros Heredia, cuyo fallo para las dos únicas imputadas se dará por la mañana de este martes.
Ante los medios de comunicación que acudieron a la audiencia de alegatos finales, leyeron una carta dirigida al juez de la causa Alejandro Sosa Maya, al fiscal Adrián López Solís, al presidente del Supremo Tribunal de Justicia, José Reséndiz, y a Alfonso Martínez Vital, procurador en Defensa de Niñas y Niños en el estado.
Una de las inconformidades del colectivo es que la Fiscalía General del Estado (FGE) no haya catalogado este crimen ocurrido en 2020 como feminicidio, sino como homicidio, aunque de cualquier forma piden que se apliquen los protocolos en perspectiva de género contemplado en la ley.
“A través del desfile de pruebas constatamos que la vida de una mujer está determinada tanto por el sexo como por el género, y dichas condiciones se ven atravesadas por intersecciones que suman vulnerabilidades, en este caso, la condición de pobreza”.
Añadieron que un feminicidio no se cataloga por el género de la persona agresora, sino por el contexto que lleva a cometerlo, y en este caso los testimonios han apuntado a un crimen de odio en razón de que Xitlali era mujer.
Apuntaron que ese escenario llevó a la víctima a ser objeto de distintas formas de violencia que se recrudecieron en los últimos años “para concluir con la máxima expresión de odio contra una mujer: su feminicidio”.
Por tanto, exigen a las autoridades apegarse a las leyes que respaldan el derecho a las mujeres de llevar una vida libre de violencia, a las que velan por los derechos de las víctimas directas e indirectas en caso de feminicidios, así como aquellas que salvaguardan el interés superior de menores.
Con dichos antecedentes, Mapas pidió que la pena aplicada para Laura N y Estephany N sea ejemplar, además de que contemple una reparación del daño para su hijo menor de edad con un monto económico que le garantice cubrir sus necesidades alimentarias, educativas, recreativas, de salud física, mental y de vivienda hasta que concluya sus estudios universitarios. También pidieron reparación para la madre de la víctima, lo que deberá incluir manutención, acceso a la salud y a una vejez digna.
El 30 de septiembre Xitlali Ballesteros Heredia fue asesinada en un domicilio del fraccionamiento Camelinas, en el sur de Morelia. Una semana después fueron detenidas Laura N y Estephany N., sospechosas de ser las autoras materiales e intelectuales del crimen.