Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- El nuevo coronavirus y las medidas para su mitigación nos llevaron a cambiar nuestras rutinas diarias de un momento a otro. Hagamos un recuento de los hábitos que la pandemia modificó.
1.- Incorporamos nuevas prácticas de higiene que convirtieron a los artículos de limpieza personal y del hogar en la estrella de la compras.
2.- El miedo al contagio en el transporte público nos llevó a optar por una nueva movilidad sostenible, transformando a la bicicleta en una gran aliada.
3.- La permanencia en casa significó modificar nuestros hábitos de consumo, como es el caso de las compras online a través de diversas plataformas.
4.- La parálisis económica durante el confinamiento nos llevó a implementar nuevos métodos de ahorro.
5.- El distanciamiento social cambió nuestra rutina afectiva. Saludar de beso, abrazar a un colega o toda aquella celebración que implicaba cercanía se reformó.
6.- Para unos el encierro generó cambios positivos en sus patrones de alimentación, mientras que otros tuvieron el efecto contrario.
7.- Remplazamos las prácticas culturales por actividades en línea como ver películas y series o tomar cursos y talleres.
8.- El aislamiento obligatorio también aumentó nuestros hábitos de lectura.
9.- Las constantes olas de contagio nos hicieron experimentar el deporte en casa a través de plataformas de streaming.
10.- Las relaciones en remoto, tanto laborales como comerciales, se convirtieron en algo usual, que si bien no puede estandarizarse, han probado ser una opción viable y efectiva.
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11.- Covid-19 vino a reestructurar la planificación didáctica. Hoy, y al parecer por un mediano plazo, trabajamos desde aulas virtuales.
12.- Debido al aumento de tiempo en casa, los espacios tuvieron que ser adaptados y repensados de tal forma que fueran funcionales como salón de clase u oficina.
13.- La falta de interacción presencial en el aislamiento, nos llevó al uso constante de herramientas digitales para realizar reuniones sociales.
14.- Las nuevas normas en bares y restaurantes cambiaron los entornos cotidianos que probablemente no vuelvas a quejarte porque te dieron la mesa de la entrada.
15.- Las caretas, mascarillas y cubrebocas pasaron a ser parte de nuestra vestimenta diaria.
16. Los pocos eventos presenciales alrededor del mundo han sido con entrada limitada. Ir al estadio de futbol, a un museo o concierto es lo opuesto a como lo conocíamos.
17. Quienes por obligación trabajan en contacto físico con otras personas, se han tenido que habituar a hacerse pruebas de Covid-19 con mucho más constancia de lo que quisieran.
18. También nos hemos acostumbrado a las consultas médicas a distancia, por lo que ver a un médico del otro lado de la pantalla es parte de la nueva normalidad.
19. Salir de compras al supermercado también sufrió modificaciones. Mientras unos optan por pedir la despensa a domicilio, otros acatan medidas como no ir acompañados de adultos mayores.
20. Aunque no ha sucedido en todos los casos, las personas más conscientes renunciaron a salir de vacaciones lejos de casa, todo con la esperanza de evitar ser contagiados.