Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- De poco sirvieron las vallas metálicas instaladas alrededor de Palacio de Gobierno, pues luego de que la marcha por el quinto aniversario de los cuatro asesinatos extrajudiciales registrados en Arantepacua arribara al centro de la ciudad, los comuneros procedieron a rayar el edificio y romper los pocos cristales que todavía estaban intactos.
Luego de más de tres horas de movilización, el contingente, al que también se sumó el magisterio y estudiantes normalistas, llegó al primer cuadro del Centro Histórico, donde se exigió justicia por la represión que se vivió el 5 de abril del 2017 en aquella comunidad indígena.
Ante la nula presencia de policías estatales, los ánimos se relajaron y los inconformes emprendieron un juicio político simbólico en contra del exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo; el fiscal del estado, Adrián López Solís y el exsecretario de Gobierno, Armando Hurtado Arévalo.
En las protestas de este martes, pobladores, maestros y normalistas han causado destrozos en la Fiscalía General del Estado (FGE) y quemaron al menos dos patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).