Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- A través de contratistas, empresarios y algunas autoridades municipales, se está presionando para que trabajadores de la minera Ternium en Aquila liberen las instalaciones, toda vez que se sigue en paro técnico como protesta por la desaparición de los activistas Antonio Díaz Valencia y Ricardo Lagunes Gasca, ocurrida el pasado 16 de enero en Cerro de Ortega, en los límites de Michoacán y Colima.
Pobladores que pidieron el anonimato indicaron que cada vez se ejercen más acciones de apuro a fin de que se abran las puertas de la empresa que dejó de operar el 20 de enero y que 32 días después entró en fase de paro técnico, con el que 900 empleados reciben el 75 por ciento de su salario.
Por ahora, los comuneros continúan decididos a no regresar a las labores, dijo la fuente, pues eso significa renunciar a la esperanza de encontrar con vida a Valencia y Lagunes, de quienes aún se ignora su paradero.
Desde la llegada de la minera a esa zona, en 2005, ha prevalecido la división en el pueblo, pues la empresa de capital ítalo-argentino ha incumplido acuerdos no solo de retribuciones económicas, sino de la preservación del medio ambiente. En 2012 Ternium hizo públicas las cantidades pagadas a los habitantes, lo que desató las extorsiones a cargo de células del crimen organizado.
Dedicada a la extracción de hierro, la firma transnacional ha operado en los últimos cuatro años sin que en Aquila exista la figura de la autoridad agraria electa democráticamente, lo que se ha obstaculizado por un reducido grupo de pobladores que estarían en contubernio con la minera.
En ese contexto y con la exigencia de que el Tribunal Agrario de Colima convoque a elecciones es que se dio la desaparición de los activistas, cuya localización está a cargo de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), mientras que la investigación fue atraída por la Fiscalía General de la República (FGR).
Gómez Urrutia se une a la exigencia de búsqueda
A tres meses de los hechos, el senador de la República y líder del sindicato minero, Napoleón Gómez Urrutia, urgió en conferencia de prensa realizada el pasado jueves a que Antonio Díaz y Ricardo Lagunes aparezcan sanos y salvos. Dijo que ambos son víctimas de desaparición forzada y se dio en un contexto de constantes agresiones a líderes que defienden el medio ambiente.
Además, acusó a Ternium de dañar con sus actividades al entorno ecológico de la zona, pues hacen “una extracción desmedida de mineral de hierro en la mina Las Encinas”.
El senador por Morena presentó un punto de acuerdo que exhorta a las fiscalías de Michoacán y Colima, así como a la federal, “a agotar todas las líneas de investigación” para la localización de los activistas, sin descartar que se indague la responsabilidad que pueda tener la empresa minera.