En el centro histórico de Zamora encontramos una plaza de armas, el Santuario Guadalupano, la Casona Pardo, el Palacio Federal, templos como el Expiatorio del Sagrado Corazón, el de San Francisco y el del Carmen, así como el Centro Regional de las Artes de Michoacán y el Teatro Obrero de Zamora.
Sin embargo, también podemos visitar un edificio con más de 100 años de historia y peculiar estilo estructural, el llamado Mercado Morelos, un inmueble dedicado al comercio desde el inicio de su planeación.
Su estructura
La construcción del Mercado Morelos comenzó en 1907 y fue inaugurado seis años después; el objetivo era ordenar el comercio de la región y, como ocurrió con muchas obras hechas durante el porfiriato, su diseño se copió del estilo desarrollado en Europa.
Es por eso que la apariencia del Mercado Morelos es similar a la edificada en los mercados de Zaragoza, Canarias, Salamanca y Madrid, en España, entre otros.
Es un inmueble compuesto por una estructura de acero y cristal, con revestimientos en concreto y cantera; su estructura está conformada por piezas de hierro fundido unidas por remaches.
Actualmente en el interior encontramos una sola nave, pero no tiene su forma original, pues se le agregaron locales comerciales a los laterales que forman un pasillo y una parte alta a la que se accede por escaleras.
Venta de recuerdos
En la actualidad en el Mercado Morelos podemos encontrar dulces regionales, antojitos mexicanos, artesanías, juguetes tradicionales, ropa y calzado.
Caminar por Zamora nos conduce inevitablemente a este sitio en el que los visitantes se pueden llevar un grato momento y un recuerdo de la ciudad; fotografiarse en la pequeña plaza que está enfrente del mercado, a un lado de su fuente, será una experiencia que los trasladará a cualquier ciudad española.