Morelia, Mich (OEM/Infomex).- El sismo de 1985, considerado uno de los desastres más grandes ocurridos en México derrumbó no sólo edificios; en segundos acabó con vidas enteras.
Según datos del gobierno dejó un saldo de tres mil 692 muertos, y miles de familias perdieron su patrimonio.
“Durante muchos años estuve muerto, aunque fisiológicamente vivía”, afirmó Saúl quien aquel 19 de septiembre fue testigo de la peor destrucción de la que ha sido testigo, según sus propias palabras.
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“El sismo me quitó a mi hermano, a mi cuñada, a dos amigos y por lo menos tres compañeros de trabajo, pero también me quitó mi tranquilidad, mi casa, mi ciudad. Salí del entonces Distrito Federal sin rumbo, sin destino y Morelia me acogió”.
Saúl, sobreviviente
Vestido con ropa deportiva y caminando por un circuito ubicado al sur de la ciudad, Saúl asegura que, aunque el suelo con cantera de la zona en donde ahora vive en la capital michoacana evita que sean perceptibles los temblores, se acostumbró a dormir con pants y a dejar junto a su cama zapatos listos para calzar
En su casa también hay una mochila de supervivencia y a manera de adorno, las agujetas de sus zapatos tienen un pequeño silbato.
“Uno queda medio loco”, bromeó.
“El 19 de septiembre de 1985, salí a las 6.30 de la mañana en punto de mi casa, tenía prisa porque tenía que dejar a mi hija en la escuela y de ahí irme hasta la Roma (colonia) para llegar a mi trabajo. Mi esposa se quedó en casa, ella salió a las 7 en punto rumbo a su trabajo. Lo madrugadores y cumplidos nos salvó”, dice con humor salpicado de nostalgia.
Saúl perdió su casa, que, aunque no se derrumbó sufrió daños estructurales que impidieron que la volviera a habitar y lo que siguió fue la lucha desesperada por saber si sus seres queridos habían corrido con la suerte de ellos.
Morelia acoge a otra sobreviviente
Ana Luisa García Santos de 65 años, radica en la ciudad de Morelia desde el año 1989, tres años después de aquél hecho.
García Santos compartió que, en el momento del temblor, ella se encontraba en su casa de la Ciudad de México ubicada en la alcaldía de Iztapalapa mientras preparaba a sus hijos para la escuela.
“A la casa no le pasó nada, pero sí fue fuerte, teníamos una litera que sí se movió, mi esposo alcanzó a detenerla antes de que se cayera, ya no alcancé a llevar a los niños a la escuela porque comenzaron a decir que la escuela estaba cerrada”.
Tomar la decisión de mudarse de la Ciudad de México surgió de una combinación entre la preocupación y la nostalgia, ya que el esposo de García Santos es originario de la capital michoacana.
“El día del temblor él trabajaba en la calle de Isabela Católica una parte muy céntrica, ahí había bastantes edificios con costureras y yo creo que durante el transcurso de los días él vio muchas cosas en esos traslados, aunque nunca me contó nada, seguramente le tocó ver cómo sacaron cuerpos desmembrados de los edificios de las costureras”.
“En segundo lugar le tocó el segundo temblor y ahí empezó a decirme que quería regresarse a Morelia”.
A partir de esto, ambos renunciaron a su trabajo y llegaron a esta ciudad capital “empacamos, renunciamos a nuestros trabajos, llegamos el 29 o 30 de agosto con la intención de que también los niños entraran a la primaria, que entonces tenían entre 9 y 12 años”.
“Cuando yo llegué no tenía trabajo, tuve que esperar un año”. Por otro lado, García Santos señala que la experiencia sobre los desastres naturales como los temblores de esa magnitud no han cambiado, “se sienten menos, pero se sienten, eso sí, estamos más seguros, más protegidos, dicen que aquí la cantera es muy fuerte”.
La Mochila de la Vida
Se trata de una mochila que debe contener artículos necesarios para la sobrevivencia. Aunque ésta debe estar adaptada a las necesidades de cada persona, instituciones como la Cruz Roja recomiendan que contenga:
- Alimentos no perecederos
- Agua embotellada (dos litros)
- Una muda de ropa
- Cobija
- Silbato
- Linterna
- Encendedor
- Pluma y libreta
- Radio portátil con pilas
- Papel higiénico y toallitas húmedas
- Dinero
- Duplicado de llaves de la casa y automóvil
- Documentos importantes en una bolsa hermética o en memoria USB
- Si tienes mascotas incluye alimento para mascotas
- Plan Familiar de Protección Civil