En Morelia, más de tres mil 500 familias están agremiadas en las nueve organizaciones de recolectores de basura. La falta de empleos, la estabilidad y la factibilidad de este oficio hacen atractiva esta actividad para personas de escasos recursos, pero también es una labor que mueve intereses que los humildes trabajadores prefieren no mencionar.
El pasado viernes fue el último día en que los recolectores instalaron un filtro de revisión de los camiones que ingresaban al relleno sanitario de la empresa Veolia, a fin de detectar y evitar que llegaran unidades pirata que brindan el servicio.
Filas de camiones repletos de basura, de hasta un kilómetro de largas, se pudieron observar a lo largo de la semana en la salida a Quiroga, y la entrada al relleno sanitario estaba fuertemente custodiada por la Policía Municipal, Policía Michoacán y por los líderes de las diversas organizaciones de recolectores.
Ello tras un conflicto suscitado la semana pasada, cuando concesionarios se confrontaron con un grupo nuevo de recolectores, y a golpes trataron de reclamar la ruta de recolección.
EL CONFLICTO
De acuerdo con los afectados, el conflicto comenzó cuando el exdiputado Fausto Gutiérrez, en conjunto con el diputado local Salvador Arvizu, lograron reclutar a un grupo de personas para que hicieran trabajos de recolección en el municipio, con la promesa de darles una concesión y permisos de trabajo.
A decir de los recolectores, el grupo de no más de 30 personas intentó otorgar el servicio e “invadió” rutas cinco veces, hasta que el pasado miércoles, a las 10:30 de la mañana, se suscitó un enfrentamiento en la colonia Leandro Valle, “donde nos bajaron con palos y tubos de los camiones, incluso hicieron disparos al aire”, detalló uno de los agredidos, quien prefirió no dar su nombre.
En el zafarrancho participaron cerca de 25 personas, además se presentaron denuncias por lesiones y amenazas con arma de fuego.
Lo que pedimos a la autoridad es que asuman su responsabilidad y que valoren, la verdad es que de este trabajo dependen miles de gentes, no es tomando un papel fifí
Marco Antonio Terreros Vega
Líder de la Empresa Zapatista de Limpieza de Morelia
En ese sentido, aseguró que si la autoridad no interviene activamente en el problema, está el riesgo de mayores enfrentamientos.
Por su parte, el presidente de la empresa Generalísimo Morelos, Roberto Anguiano Méndez, defendió que la presencia que tuvieron los líderes de recolectores en el relleno sanitario no fue una toma, sino la instalación de filtros para certificar que no ingresaran unidades pirata.
Son más de 600 concesiones, que es cada unidad, de ahí dependen tres o cuatro familias de trabajo directo, más el indirecto en los centros de acopio hay mucha más gente. La gente que traía ni recolectores son, los que llamamos ‘tolucos’, que vienen con los camioncitos de se compra son los que están engañando
Explicó que las afectaciones de la extensión de recolección particular de basura por toda la entidad ha mermado las ganancias por jornal de quienes cuentan con una concesión, ocasionando el despido de personal, que ya de por sí gana muy poco en esta labor.