En un día como hoy se promulgó en México la Ley para el Establecimiento y Uso de los Cementerios; fue el 30 de enero de 1857 cuando el presidente sustituto Ignacio Comonfort declaró necesario llevar un registro de todas las personas que mueren.
Antes de esa Ley las sepulturas eran comunes dentro de los recintos religiosos católicos, pero después esa práctica fue prohibida, sólo permitida para los restos de presidentes, obispos, arzobispos y ministros de cortes extranjeras.
A raíz de esa norma el control de la sepultura y registro de fallecimientos pasó a cargo de los gobiernos municipales de cada estado de la República, de acuerdo al artículo 115, fracción III, inciso e), de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
De acuerdo a datos del INEGI, hasta el año 2020 se tiene un registro de 3 mil 953 panteones establecidos en los municipios de todo el país.
A 167 años de la promulgación de esa ley, El Sol de Zamora recopila los cinco cementerios más grandes del mundo, dos de los cuales se encuentran en Estados Unidos.
El más grande registrado es el cementerio iraquí Wadi al Salam, en la ciudad de Nayaf; en el cual se encuentran más de 5 millones de tumbas y es de carácter islámico.
El segundo más grande es el cementerio nacional de Calverton, éste se encuentra en el condado de Suffolk, al este de Long Island en Nueva York; en él hay más de 312 mil entierros.
El tercero mas grande del mundo es el cementerio nacional Abraham Lincoln, ubicado en Estados Unidos; actualmente tiene 397 hectáreas y fue fundado en 1862.
El cuarto más grande se encuentra en Alemania, es el panteón de Ohlsdorf, donde reposan los restos de más de 280 mil personas en aproximadamente 391 hectáreas.
Por último tenemos el cementario turco de Karacaahmet, éste es el más atiguo de Estámbul y en él hay más de un millón de entierros.
