Morelia, Mich. (OEM-Infomex).- En el Bosque Morelos, junto a la Unidad Deportiva Bicentenario, se esconde el “Ejido Santiaguito”, un sitio que solía formar parte de la laguna de la Soledad, el último humedal vivo en la zona del poniente moreliano, que poco a poco se extinguió gracias a la construcción del complejo deportivo.
En el corazón de la colonia Ampliación La Soledad, se encuentra el “Ejido Santiaguito”, un terreno que hasta hace no mucho se encontraba vacío, pero que se ha ido convirtiendo lentamente en un tiradero de basura y escombros al cual, sin ningún permiso, acuden diariamente personas a depositar desechos ante la vista de todos.
Mientras tanto, los vecinos deben convivir diariamente con la basura del lugar y a quienes atrae este sitio, quienes comentan que ha aumentado la llegada de “vagos” y personas con adicciones, a quienes perciben como un riesgo.
“Están rellenando con escombro, con basura, con lo que encuentran, como todas las obras, lo que sucede es que, se la pasa la gente aquí, los que juntan la basura se llegan a robar las cosas de uno y uno tiene que andar más que nada al pendiente de que no nos falte nada”, dijo Salvador García Arévalo, vecino de la colonia.
Aunado a ello, las residentes de la colonia aseguran que las enfermedades están al orden del día, pues hay temporadas en que la quema de basura no para, lo que ha ocasionado problemas respiratorios en niños y adultos mayores “mejor no salimos de nuestras casas, porque le prenden y puede durar días prendido”, comentaron.
Sin embargo, ésta no era la vida a la que estaban acostumbrados los vecinos de la colonia Ampliación La Soledad, pues a decir de los pobladores de la zona, el ejido permanecía como un lote baldío hasta hace aproximadamente un año, cuando comenzaron a llegar camiones a tirar escombros y gente que aprovechó la situación para convertirlo en el tiradero de la zona.
Ahora, decenas de familias viven a tan sólo unos metros de un sitio plagado de basura y escombros, “una tierra de nadie” ya que, aunque se sabe que se tienen las intenciones de construir en el ejido, los vecinos de la colonia desconocen el futuro del lugar.
“Antes era un baldío, estaba limpio, tiene más de un año que empezaron a tirar basura ahí, habían dicho que iban a hacer casas Infonavit, luego que un Oxxo, luego que una farmacia, se ha dicho mucho, pero no se hace nada y mientras tanto se sigue llenando de basura”, mencionó la señora María Elena Villa Pérez.
Niega Ayuntamiento que el humedal sea un basurero
El “Ejido Santiaguito” no es considerado por autoridades municipales como un basurero clandestino, sino un “sitio privado que se está rellenando con materiales de construcción y de relleno” según lo expuesto por el Director de Residuos Sólidos, Esteban González Luna.
El funcionario apuntó que no existen reportes de que este ejido sea usado como un tiradero de basura, no obstante, no descartó la posibilidad de que este sitio, como otros 20 lugares más en la periferia de la ciudad, pudiera ser usado como tiradero clandestino, pese a las declaraciones de vecinos, quienes el pasado domingo precensiaron cómo un camión lleno de llantas usadas las arrojaba en el lugar sin mayor problema.
“Tenemos alrededor de 21 tiraderos en la periferia de Morelia, es la misma gente de la ciudad y de la zona rural, la que en carreteras tiran basura, se va acumulando hasta convertirse en una especie de basurero, pero nosotros vamos y recogemos todo lo que encontramos”, acotó.
El problema radica en que, si bien se elimina los rastros de basura que puedan existir en los lugares denunciados, no existen responsables por estos actos y éste es un “problema cíclico”, como lo calificó el director González Luna.
“Nosotros no podemos multar a nadie, si no tenemos un documento que nos avale quienes son infractores, (...) hemos intervenido 11 tiraderos de los que sabemos que existen sin ningún infractor, no nos es posible saber quien lo hace”, indicó.
De tal forma que, aún cuando se puedan mejorar los espacios momentáneamente y retirar la basura excesiva de lugares que no cuentan con adecuaciones para mantener este tipo de insumos, el municipio no regula los tiraderos clandestinos en los alrededores de la ciudad, únicamente los limpia, dijo.
Por su parte, el “Ejido Santiaguito” continuará siendo un terreno que se adecua para la construcción de lotes para la venta de casas, mientras tanto, quienes laboran en la zona, como Don Fidel Tapia, encargado de asentar los escombros que taparán lo que resta del humedal, tiene que lidiar con “el mundo de basura que llega todos los días”.