Morelia, Michoacán.-El estado de Michoacán se mantiene rezagado en cuanto a la inclusión de las personas con alguna discapacidad, pero también en el establecimiento de políticas públicas que generen un mayor bienestar, mejor infraestructura y movilidad, así como la existencia de un Instituto que les permita atender sus demandas y reclamos como sucede en otros rubros de las mujeres, los indígenas o los migrantes.
Con preocupación, el diputado local del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Víctor Zurita Ortiz, quien en las elecciones del 2021 fue elegido como el primer legislador sordo a nivel nacional, evidenció que pese a los “pequeños” pasos que se han dado en la entidad en términos de visibilizar a la comunidad con discapacidad, en los hechos hace falta todavía mucho trabajo para que este grupo se sienta realmente representado en los tres Poderes.
Lo que más impacta en las personas con discapacidad en Michoacán, detalló Zurita Ortiz, es el tema de la movilidad, ya que Michoacán sigue sin tener una infraestructura acorde a las necesidades de este sector marginado e invisibilizado durante muchos años, al referirse a la existencia de rampas construidas en todas las colonias, banquetas bien hechas, caminos táctiles, espacios con braille o un transporte destinado solo para quienes viven todos los días con una discapacidad.
No sólo es la falta de infraestructura, mencionó el diputado moreliano, misma que los gobiernos han omitido durante muchos años, porque se rehúsan en invertir o modificar lo que ya existe, sino también, desde las propias familias que muchas veces limitan a las personas con discapacidad en el sentido de invisibilizadas por vergüenza, temor o falta de información al respecto.
El legislador local de Morena, recordó que el 95 por ciento de los padres de familia con un hijo o hija con alguna discapacidad, desconocen la lengua de señas mexicana y por tanto se les complica todavía más poder comunicarse con sus familiares. “Su única respuesta es aislarlos y tenerlos en sus casas para que no salgan ni tampoco tengan comunicación con el exterior, pues son muchas veces considerados como estorbos”, comentó.
El medio de transporte especializado para las personas con discapacidad en Michoacán, es uno de los principales pendientes que no se resuelve en la entidad pese a que las distintas asociaciones lo exigen “a gritos” a las autoridades para que en sus presupuestos designen partidas presupuestales que permitan la adquisición de un parque vehícular exclusivo para este sector vulnerable.
No hay transporte digno ni acorde a las personas con discapacidad motriz, visual, del habla, auditiva, múltiple, intelectual y mental, y cuando ellos salen a las calles se encuentran con muchas barreras no sólo en movilidad sino social, porque tampoco les ayudan a movilizarse por las ciudades, expuso.
La mayoría de estas personas tienen que pedir taxis o Uber para trasladarse a sus lugares de trabajo o cualquier lugar de la ciudad, lo cual les sale muy caro en términos económicos. Aunque las autoridades estatales y municipales tienen claro este tipo de dificultades, Zurita Ortiz denunció que Michoacán sigue retrasado y rezagado en cuanto a que haya más políticas publicas en favor de este grupo vulnerable de la entidad.
A pesar de que la Ley General de Inclusión para las Personas con Discapacidad en el estado aprobada en el 2014 es de la más avanzadas, en la realidad no se cumple a cabalidad, porque siguen naciendo niños y niñas con algún tipo de discapacidad sin ser realmente incluidos en los centros educativos, en actividades que se llevan a cabo desde el gobierno o la misma sociedad, sólo por el simple hecho de que viven con esta condición.
Para el primer diputado sordo en Michoacán, es en los municipios donde aún hace falta generar la cultura y la conciencia en la sociedad, pero sobre todo al interior de las dependencias gubernamentales, ya que en la entidad se estima que hay 832 mil personas con algún tipo de discapacidad, pero en su perspectiva hay muchos más porque a las familias les da pena decir que tienen un familiar con en esta condición.
No hay avances significativos en esta materia, de acuerdo con Víctor Zurita, porque aún hay mucha lentitud, por ejemplo, en la conformación de un Instituto para la atención de las personas con discapacidad, como existe en otras entidades como son Guanajuato, la Ciudad de México, Jalisco y Monterrey.
Dicho Instituto sería muy importante en el estad porque a través de esta infraestructura gubernamental, dijo, se otorgarían espacios, atención a las diferentes problemáticas del sector, pero sobre todo, se configurarían distintas políticas públicas, e incluso, asesorías en conjunto con otras Secretarías.
El formar parte de la 75 Legislatura de Michoacán, de acuerdo a lo manifestado por el diputado no ha sido nada fácil, porque en un inicio se enfrentó con un Congreso que también carece de accesibilidad para las personas con discapacidad, no existe un elevador, ni rampas suficientes, ni tampoco infraestructura para quienes tienen discapacidad visual.
Aunque con el paso de los periodos legislativos ha podido exigir desde tribuna una mayor inclusión empezando por sus compañeros de Congreso, todavía aseveró que hace falta más concientización para que los mismos legisladores y trabajadores del Poder Legislativo se comprometan con una agenda de discapacidad.
Yo agradezco que en el Congreso pueda contar con intérpretes de señas, pues son el puente de comunicación con los demás diputados, quienes han generado la aceptación por mi discapacidad, pero es que nunca antes habían tenido la convivencia tan cercana con una persona sorda y algunos se esfuerzan en comunicarse conmigo y eso ha generado un precedente, del cual, estoy muy orgulloso, destacó el morenista.