Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Familiares y colectivas feministas exigieron al Poder Judicial del Estado de Michoacán la pena máxima por feminicidio a Francisco Ignacio "O", presunto asesino de Gabriela Pérez, que fue apuñalada en su trabajo en Mil Amoles. Asimismo, piden que se reforme el Código Penal del estado en esta materia.

A través de un pronunciamiento, los firmantes aseguran que el asesinato de Gaby cuenta con las cinco circunstancias estipuladas en el artículo 120 del Código Penal del Estado de Michoacán, además de diversas circunstancias calificativas contempladas en el artículo 135 del mismo ordenamiento.

Estas circunstancias son: ventaja, traición, alevosía, retribución y saña o estado de alteración voluntaria.

Pormenorizaron que la ventaja se cumplió toda vez que Francisco aprovechó su fuerza superior a la de Gaby. La traición, porque era esposo de la víctima

La alevosía, pues sorprendió de manera intencional a la mujer en su lugar de trabajo, tras haber empleado acechanza, lo cual indica que conocía sus horarios y rutinas, así como los momentos de menos afluencia de gente. Además de la saña, pues el exesposo de Gaby la mató con más de 30 puñaladas.

Piden reformas

Las colectivas lamentaron que en Michoacán, la pena máxima por feminicidio sea de 40 años y para que se dicte esta sentencia, se requiere una "desproporcionada numeración de circunstancias agravantes requeridas".

Asimismo, expresaron su inconformidad con que en el estado la pena máxima sea de 40 años, mientras que para otros delitos es de 90 años.

"Consideramos sumamente grave que, en un estado con un índice tan alto de feminicidios no perseguidos por el Estado, existan otros delitos cuyas penas máximas oscilan entre los 90 años, mientras que para el feminicidio sea en promedio 25 años", dice el pronunciamiento.

Por lo anterior, Congreso de Michoacán que reforme el Código Penal para que los delitos de feminicidio se castiguen de manera ejemplar y con penas máximas mayores y equiparables al grado de violencia y tortura que han vivido las víctimas, siguiendo principios de proporcionalidad mayores.