Morelia, Michoacán.-El fiscal de Michoacán, Adrián López Solís, confirmó que detrás de la desaparición de los siete elementos de la policía comunal en La Cantera, Tangamandapio, está una célula delincuencial que opera en sus zonas con capacidad de fuego y física para haber sometido a estos elementos.
Esta mañana se informó de la aparición con vida de los siete elementos comunales después de haber estado desaparecidos desde el pasado martes, a lo que el fiscal de Michoacán, comentó que los siete elementos fueron localizados a un lado de la carretera por parte de agrupamientos de búsqueda de la Guardia Civil, quienes los liberaron.
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En una muy breve entrevista colectiva en un evento del Supremo Tribunal de Justicia de Michoacán, López Solis remarcó que la localización con vida de los siete guardias comunales, es el resultado de la búsqueda que se llevó a cabo por parte de la Fiscalía y agrupaciones policiacas.
Sobre el particular, el fiscal confirmó que por las características del hecho delictivo con los siete guardias comunales de La Cantera, se debió tratar de un estado de fuerza importante a cargo de una célula delincuencial que opera en la zona de Tangamandapio, pues dijo, que los criminales tuvieron capacidad de fuego y física para someter a los elementos.
Agregó que cuando se asumen labores de seguridad o de procuración de justicia, los elementos a cargo deben tener las habilidades para identificar riesgos y hacer frente a la delincuencia.
Por lo cual, el fiscal de Michoacán consideró que estos elementos comunales requieren de mayores procesos de capacitación que después de esta experiencia, se pronunció para que se tome en cuenta, toda vez que es un tema en el que las comunidades indígenas no están exentas a riesgos en materia de inseguridad.
