Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El Centro Histórico de Zamora esconde una rica muestra arquitectónica que nos transporta a diferentes épocas, una de esta muestra es la Fuente de la Plaza principal de Zamora, un testimonio histórico de gran importancia y belleza. Aquí te hablamos de este hermoso espacio.
La ciudad de Zamora fue fundada en el año de 1574 durante el Virreinato de Nueva España. Y actualmente la ciudad conserva una mezcla de estilos que reflejan su historia y desarrollo a lo largo de los siglos, como lo es la fuente ubicada en la Plaza de Armas de Zamora, la cual se construyó entre los siglos XIX y XX.
La Fuente de la Plaza de Zamora destaca por su carga histórica neoclásica, es decir, por su estilo arquitectónico neoclásico. Este estilo llegó a México aproximadamente en 1701, traído desde Europa. Y con la llegada de los españoles a la región de Zamora se adoptó este tipo de arquitectura, asimismo, el estilo neogótico y el estilo ecléctico.
Esta fuente describe una figura expresiva de la arquitectura neoclásica y ecléctica, sus principales características de estas fuentes, suelen ser grandes y elaboradas, con detalles marcados, como tallados en la piedra, puede haber figuras, relieves e incluso esculturas. En general, estas fuentes son muy detalladas y muy adornadas.
La fuente arquitectónica a las que hacemos referencia tenían dos funciones concretas en la antigua ciudad de Zamora, por un lado tenemos la función decorativa y ornamental, la cual decora y embellece a la Plaza de Armas. Y por otro lado, cumplía la función práctica de proveer agua potable a la comunidad, para uso doméstico y personal público.
Anteriormente las fuentes eran consideradas como símbolos de progreso y modernidad, ya que su construcción era un reflejo de las transformaciones urbanas y el desarrollo que experimentaba la ciudad. Estas obras arquitectónicas formaban parte de los esfuerzos por embellecer y modernizar las ciudades mexicanas.
El Centro Histórico de Zamora se erige como un testimonio vivo de la historia de México. Sus calles, sus fachadas, sus fuentes de imponente belleza arquitectónica nos invitan a recorrer el pasado y descubrir la historia que se encuentra entre sus muros. Zamora con su herencia arquitectónica.
Actualmente, para los zamoranos la fuente es un lugar popular para reunirse y socializar, asimismo es un bello y apacible añadido a la Plaza de Armas. De tal manera, la fuente es un monumento histórico de gran belleza que posee Zamora y un símbolo de la rica historia, y cultura de la ciudad.