Iglesias sin religión, proceso de pacificación de Michoacán

Ministerios religiosos “dispuestos” a ayudar sin introducir algún culto 

César Abrego

  · sábado 19 de octubre de 2019

Foto: Adid Jiménez

Morelia, Mich. (OEM-Infomex).- Independientemente de los trabajos gubernamentales para mantener un pueblo en paz y reconciliado consigo mismo pese a las adversidades que conlleva el perder a un familiar o asimismo al ser víctima de algún hecho de violencia, está también el ansia de que las personas, sin importar edad o clase social, retomen los principios, la espiritualidad, tranquilidad y la familia, aunque esto no conlleve realizarlo desde un ámbito religioso.

Sobre ello, los ministerios religiosos de Michoacán se han dicho proactivos en su intento por pacificar y traer nuevamente la tranquilidad al pueblo michoacano, pero que, transcurrida más de una década con cientos de sucesos llenos de violencia y el baño de sangre que ha empapado la calma de sus ciudadanos, reconocen no será un procedimiento sencillo o exprés, en medio de una constante ola de homicidios que, tan sólo en los primeros ocho meses del 2019, ha dejado 975 víctimas, según cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Información (INEGI).

Dentro de todos los procesos de formación y educación depende la disposición y empeño de las personas, hasta este momento se ha ido facilitando porque hay voluntarios que se capacitan para implementar los programas, es decir están acudiendo a nosotros para brindar el beneficio, expresó Carlos Garfias Merlos, arzobispo de Morelia, al reconocer que pese a lo tedioso que puede ser la consumación de sus objetivos, hasta este momento las acciones encaminadas a la pacificación han ayudado a más de 400 familias en toda la entidad.

La máxima autoridad de la Iglesia católica en la capital michoacana compartió sobre los dos programas implementados en Michoacán desde su trinchera, orientados a la prevención y la actuación; un primer paso es un proyecto educativo, donde fundamentalmente se busca atender el tema de valores, construcción de paz y capacitación de las personas por medio del dialogo y la mediación, a fin de contar con alternativas para la solución de conflictos internos.

Y una segunda etapa, la instalación de centros de escucha como un primer respondiente de auxilio, en donde se pongan a las víctimas de algún tipo de violencia en un nivel de atención específica en la cuestión psicosocial, espiritual, pastoral y si es posible jurídica. Sumándose a esto la apertura de otros círculos para la rehabilitación y atención a personas con adicciones; de autoayuda para mujeres víctimas de violencia; y para el fortalecimiento de la unión familiar.

Se están capacitando a los facilitadores y se están implementando en Morelia y en las otras cuatro diócesis, junto a las escuelas de perdón y reconciliación (…) nuestra decisión de buscar un plan de construcción de paz ha surgido de la realidad de hechos violentos que han dañado fuertemente a las personas y a las familias

Garfias Merlos

También admitió haber encontrado una respuesta “esperanzadora”, ante el hecho de que se ha multiplicado el número de personas voluntarias y beneficiadas.

Durante un recorrido realizado por El Sol de Morelia al Centro de Escucha, ubicado en la calle Benito Juárez #156 en la colonia Centro de la capital michoacana, se pudo constatar como en cada uno de los salones interiores del recinto están los distintos grupos de atención psicológica, pastoral y jurídica, mismos en los que a la fecha han atendido a decenas de víctimas de violencia intrafamiliar hasta directas e indirectas de algún tipo de siniestro como el secuestro, intento de homicidio y otros eventos desafortunados.

Además de contar con un grupo de psicólogos voluntarios que dan atención inmediata, también contamos con un grupo de abogados que se encarga de asesorarlos para asistir a la comisión estatal y nacional de víctimas para ver los procesos para buscar la reparación de los daños, si es que fuera el caso

A su vez, aclaró que si bien es un centro abierto para toda la ciudadanía sin importar filias ni fobias religiosas, también ofrecen atención pastoral y espiritual con la finalidad de que las personas después de un evento violento puedan incorporarse a la comunidad a través de la parroquia, ya que han detectado cerrazón de las familias por el temor e incluso vergüenza después de algún evento desafortunado derivado de la estigmatización de la cual son objetos.

Nosotros abrimos la estructura de la parroquia para que vayan incorporándose, entonces tenemos alternativas pastorales para apoyar a las víctimas de la violencia. La otra parte más importante es la espiritual, hay un grupo de sacerdotes y además de gente que tiene una espiritualidad muy solida que, desde la parte de la fe, tratamos de que recuperen la esperanza

De allí que enfatizara en la intensa búsqueda de que aquellas personas afectadas por algún evento perdonen y no exista la posibilidad de que con el rencor y la ira traten de hacerse justicia por su propia mano, reconciliándose así con la sociedad, sus interlocutores e incluso con los agresores directos o de sus seres queridos.

Esfuerzos que también han sido respaldados por el Consejo Interreligioso de Michoacán, pues si bien cada organización religiosa trabaja desde sus ámbitos y con sus suscribientes optaron por adherirse a la misma ruta de trabajo en busca de que se introduzca la paz sobre el prójimo a través del perdón, fomentando así el retomar los principios espirituales como el amor, la gracia y la compasión, precisó el presidente de la organización, Juan Spyker en entrevista exclusiva para El Sol de Morelia.

En Michoacán, el país y el mundo hay olas sin precedentes de violencia, venganza, homicidios, feminicidios, y la Iglesia más que nunca tiene que levantar su voz pero enseñando los principios espirituales de la Biblia, de la palabra de Dios; no podemos acabar con este fenómeno nada más atendiendo problemas río abajo, si yo me pongo ahí tratando de ‘sacar toda la basura’ nunca voy a acabar porque viene del origen

refirió uno de los líderes de la Iglesia cristiana en Michoacán.

Desde su óptica, dijo, los ciudadanos están muy deseosos de que alguien les enseñe el camino para encontrar la fe y la esperanza, por ello que como ministerio religioso cristiano estén más enfocados en fortalecer a la familia y los matrimonios, las relaciones entre padres e hijos, toda vez que están más enfocados en evitar que se levante más criminales que en “agarrarlos”, por lo que al momento de acercarse con aquellos núcleos familiares con alguna discordia buscan únicamente sanear sus problemas.

No lo hacemos de una forma religiosa, no se trata de religión y tradición de mandamientos, son valores universales de amar al prójimo (…) nosotros encantados de ayudar a la gente en su lucha de encontrar más sabiduría, más luz en estos tiempos de confusión, tinieblas. Nosotros tenemos mucha preocupación, pero confío que podamos ayudar a Michoacán una persona a la vez, una familia, un matrimonio a la vez


El líder espiritual reconoció que el grado de delincuencia ha sido al grado de que en un solo día cuatro familias se acercaron para solicitar la elevación de oraciones por familiares que habían sido secuestrados, algunos que al paso de los días fueron liberados, pero otros que no corrieron con la misma suerte. “Cuando alguien fallece ahí estamos con las familias consolando, animando, diciéndoles ‘nada van a ganarse si buscan venganza de esto, suelten eso porque sino todo podrá agravarse aún más’”, comentó.

Finalmente, Juan Spyker remató con que para lograr la pacificación, lo cual es algo difícil, aún confían en el poder de la unión, pues ha sido espectador de casos de una total transformación de personas que se dedicaban a actividades delincuenciales y que después de un continuo proceso espiritual y de introducción de los valores universales se han reivindicado, así como también de presos acusados de delitos graves como secuestro o violación como han accedido al perdón y a retomar sus principios.

DATOS

  • Los ciudadanos están muy deseosos de que alguien les enseñe el camino para encontrar la fe y la esperanza
  • La máxima autoridad de la Iglesia católica en la capital michoacana compartió sobre los dos programas implementados en Michoacán desde su trinchera, orientados a la prevención y la actuación