Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Luego de sobreponerse a una serie de recursos legales, este lunes comenzó el juicio oral para resolver el caso de Jessica González Villaseñor, asesinada a finales de septiembre de 2020 y por quien permanece preso como único imputado el joven Diego Urik N.
El desfile de testimonios, que incluirá a 50 personas dispuestas por el Ministerio Público, arrancó con Verónica Villaseñor y Cristo González, madre y hermano de la víctima, quienes relataron cómo fue el día en que la en ese entonces recién graduada como maestra desapareció de su casa.
De acuerdo con la señora, Jessica informó ese 21 de septiembre que iría a tomar un café con una de sus amigas, pero en realidad abordó el auto de Diego Urik, quien la habría violado y asesinado horas más tarde, arrojando su cuerpo semidesnudo a un lote ubicado al sur de la ciudad, cercano al área de Altozano.
Verónica dijo ante el juez que al transcurrir varias horas y no saber nada de su hija, optaron por abrir su computadora personal y tratar de averiguar datos extras, además de preguntar a todas sus amigas, quienes ignoraban su paradero y finalmente poner la denuncia en la Fiscalía General del Estado (FGE).
Por su parte, Cristo González relató que fue el encargado de reconocer el cadáver, lo que describió como el día más difícil de su vida, y en la misma sala observó varias fotografías y videos de lo sucedido, con Diego y Jessica en un mismo auto, aunque en un formato blanco y negro que no permitía una buena apreciación.
Uno de los puntos de la defensa fue demostrar que la línea del teléfono de Jessica siguió activa aún después de su muerte, lo que fue aclarado por Verónica, quien dijo que efectivamente acudieron a Telcel para recuperar ese número y así verificar datos que los pudieran ayudar.
En entrevista posterior, madre e hijo dijeron sentirse tranquilos con el inicio del juicio oral, aunque precisaron que todo el proceso favorece al imputado y los revictimiza a ellos.
También subrayaron que tuvieron un leve altercado con el padre de Diego momentos antes de iniciar la audiencia, quien intentó abordarlos pero rechazaron cualquier intercambio de palabras, y solo le recomendaron que se diga la verdad para que el caso concluya pronto.