Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Zoé Tamar Infante Jiménez nos recibe en el edificio de Rectoría. El nuevo secretario general de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) quien asumió el cargo el pasado 9 de enero, comenta que a más tardar en un mes tendrán el diagnóstico del estado que guarda la institución, sin embargo, adelantó a este medio sobre las prioridades, retos y proyectos a corto plazo.
El objetivo es catapultar a la institución al plano internacional, no obstante, el nuevo secretario general aseguró en entrevista que los retos actuales son la parte académica y la infraestructura. El diagnóstico hasta el momento arroja pendientes relacionados a las convocatorias que quedaron suspendidas en la gestión de recursos por inconformidad en los dictámenes y la rehabilitación de baños y edificios en diversas facultades.
Este último punto es importante para obtener acreditaciones y certificaciones de determinados programas y aunque algunas solo requieren de mantenimiento, existen otras que necesitan de mayor acompañamiento; en ese sentido el funcionario comentó que la Facultad de Arquitectura e Ingeniería Civil desarrollan proyectos con la idea de trabajar la infraestructura de la universidad.
“Ese es el diagnóstico, pero en los proyectos de mediano y largo plazo se trata de impulsar los programas educativos y acompañar los procesos de acreditación de las propias dependencias, una vez que tengamos los recorridos completos podremos construir el plan en el estado académico, de investigación y vinculación”.
Acreditaciones, matrícula y campus
En días pasados la rectora de la Casa de Hidalgo, Yarabí Ávila González, indicó que se trabaja para obtener la acreditación del programa de Bachillerato, la cual puede tener un costo de 500 mil pesos, pero otra certificación en puerta es la de Ingeniería Química, cuyo proceso concluye en febrero y que de ser aprobado podría obtener su quinta acreditación.
Zoé Infante afirmó que la matrícula de la institución incrementó después de la pandemia, ya que durante el periodo de confinamiento hubo bajas considerables, pero al momento la universidad cuenta con un aproximado de 54 mil estudiantes.
Apenas este jueves, el secretario general y la rectora viajaron a la Unidad Profesional o Campus de Uruapan, donde están inscritos poco más de 500 alumnos, pero la expectativa es que crezca significativamente. Ambos funcionarios visitarán la próxima semana la Unidad Profesional del Balsas en Huetamo.
Presupuesto para la universidad no es suficiente
Este año, el Congreso del estado otorgó un presupuesto de tres mil 579 millones 973 mil 63 pesos, siete por ciento más en comparación al anterior, pero a decir del funcionario aún no es suficiente para la institución.
“Se agradece el incremento en temas presupuestales, nuestro trabajo se centrará en hacer gestiones para lograr un presupuesto necesario (…) la intención es llegar a los cuatro mil millones de pesos, pero al mismo tiempo buscar otras alternativas para que tengamos un flujo de recursos mayor”.
En ese sentido, detalló que la universidad buscará generar sus propios recursos a partir de proyectos de los distintos programas que ofrecen para tener una “universidad proactiva” y no solo pasiva. Sin embargo, comentó que una de las áreas que ha estado descuidada por muchos años es la de Vinculación, en la que ya iniciaron una serie de estrategias para buscar a las embajadas.
La idea, será acercase con organismos, empresas y otros entes tanto del norte del país como con otros a nivel internacional y ver que proyectos de la institución nicolaita pueden aterrizar.