Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Las 55 marcas colectivas artesanales que existen en Michoacán han sido denostadas, incluso hay algunas que están en decadencia por falta de apoyo y reconocimiento de las autoridades, aseguró Abel Castillo Martínez, presidente del Consejo Michoacano de Marcas Colectivas.
En el marco de la firma de colaboración entre el Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart) y el Gobierno del Estado, Castillo Martínez comentó que los artesanos han sido denostados y hasta menospreciados en administraciones pasadas.
“Se supone que una marca colectiva no está para recibir favores de ningún gobierno, eso nos queda claro, pero hay eventos que no se pueden llevar a cabo sino se cuenta con el visto bueno del gobierno estatal o municipal”, pese a que las localidades son internacionales por su artesanías, como Paracho, municipio al que se conoce por el trabajo artesanal de la guitarra.
El representante afirmó que el reconocimiento de municipios o comunidades se le debe a los maestros artesanos, no a las autoridades, agregando que la esfera que se fabrica en Tlalpujahua ha traspasado fronteras adornando el árbol navideño de la Casa Blanca, así como el árbol de Sede Episcopal Romana.
“Nosotros (los artesanos) somos los que les damos popularidad y aparte, como una actividad familiar, la labor artesanal no se perderá por lo que será trascendental proteger el patrimonio humano", expresó.
Aunque actualmente existen alrededor de 20 mil artesanos, según Castillo Martínez solo 800 se encuentran debidamente certificados a través del Instituto de Capacitación para el Trabajo del Estado (ICATMI), que es un documento que acredita un nivel artesanal altamente calificado.
De entre los productos que generan estas marcas, se encuentran la guitarra, la esfera, la pasta de caña, el mueble tallado de Pátzcuaro, la Catrina, el cobre de Santa Clara, la piñas de San José de Gracia, el barro vidriado de Zinapécuaro así como también la cantera rosa de Morelia.
Para el maestro artesano Mario Agustín Gaspar Rodríguez, los reconocimientos al trabajo que realizan ya sea verbal, de papel o en la compra de alguna pieza, son momentáneos, pues se requiere apoyos gubernamentales para sacar a flote al sector artesanal, que en los últimos años fue duramente golpeado a consecuencia de la pandemia del coronavirus.
"Al Instituto del Artesano le hace falta mucho recurso para que los apoyos sean encaminados a la investigación, a la preparación de los artesanos, y a la mejora de los talleres, para darle mayor calidad de las piezas", indicó.
Gaspar Rodríguez, uno de los ocho especialista en pasta de caña que existen en la entidad, sostuvo que cuando “el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla era diputado local, se le solicitó que asignara un mayor presupuesto al Instituto para que ese recurso se reflejara en el beneficio de los artesanos. En su momento contestó que eso no le correspondía a los diputados, sino al gobernador. Ahora él es gobernador, por lo que le corresponde dar ese apoyo”.
Afirmó que el 70 por ciento del presupuesto del instituto, se va en el pago de gasto corriente y salarios, el resto es lo que se destina a los artesanos, un porcentaje muy bajo que en nada ayuda a mejorar el trabajo artesanal.
Contrario a ello, Emma Yanes Riso, directora general de Fonart, aseguró que lo más importante para los artesanos era que se reconociera su trabajo, no solo brindarles apoyo.
Por su parte el gobernador Ramírez Bedolla reconoció que Michoacán es distinguido a nivel internacional por su artesanía, por lo que se impulsará al sector a través de la realización de más festivales y ferias artesanales, proponiendo para ello una que pueda llevarse a cabo en Zamora, tal como la que se realiza en Semana Santa, en el municipio de Uruapan.
Aunado a ello mencionó que próximamente se instalará un Comité Técnico para que el municipio de Pátzcuaro sea reconocido como patrimonio cultural de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
