Morelia, Michoacán.- Los productores michoacanos de mezcal continúan demostrando su ingenio en esta bebida cada vez más popularizada entre la ciudadanía. Y en esta ocasión no es la excepción con Jorge Luis Rocha Arreola, joven originario de la comunidad de Tumbisca, localizada en Morelia.

Él proviene de una familia con herencia mezcalera, solo que Jorge Luis ha ido más allá, y dentro de las innovaciones que ha integrado a este producto líquido, ha sido la diamantina comestible que de una idea para una fecha en específico, resultó tener gran aceptación en el público, por lo que ahora prevé dejarlo como una variación ya establecida.

En entrevista con El Sol de Morelia, el productor mezcalero michoacano de 29 años, explicó, él es egresado de la licenciatura de Psicología Educativa, pero la pasión por involucrarse en el negocio familiar, terminó por atraerlo para apoyar a sus familiares.

“El tema del mezcal ya lo traemos en mi familia en la sangre, solo que hora fui más allá y le di un impulso mayor con la diamantina comestible”, comentó el joven enfocado en la distribución del producto.

Mezcal con diamantina comestible

Respecto al producto que ha atraído la mirada no solo de los locales, sino de turistas y visitantes nacionales e internacionales, el entrevistado dio más detalles sobre este trabajo en pro de la cultura líquida de Michoacán.

“Comencé platicándolo con amigos, entonces apareció la idea del mezcal con diamantina comestible, entonces revisamos la oportunidad y nos adentramos en la mercadotecnia. Este mezcal nació principalmente por el mes del PRIDE”, explicó el mezcalero que da trabajo a cerca de 15 personas.

Aunque esa edición especial tuvo un motivo, aún continúa con distintos ejemplares que ha promocionado en las diversas ferias en las que ha participado, destacándose de entre los demás productores de diversos servicios ofertados.

“Quisimos innovar a esta forma diferente de ver el mezcal y no quedarnos en lo básico, sino diferenciarnos”, explicó.

Respecto al proceso de investigación donde se involucraron especialistas para efectuar las pruebas antes de salir el mercado, Jorge Luis, aseguró, pasó todas las pruebas este líquido.

“Tenemos una persona llamada Ivonne, ella se encarga de analizar los alimentos, ella nos orientó para decirnos cuanta cantidad de diamantina debería de llevar”.

Aunado a lo anterior, se investigó que todas las cantidades de alcohol fuera la adecuada y no hubiera ninguna reacción adversa, “para estas pruebas nos llevamos casi un mes”.

Aunque el mes del PRIDE quedó atrás, la respuesta a este producto sigue siendo satisfactoria por parte del consumidor, por lo que el entrevistado señaló, todavía tienen diversas botellas a la venta.

“Entre los turistas que lo han adquirido, han sido personas de Los Ángeles, Texas y Chicago, Estados Unidos, mientras que en lo nacional, han sido turistas de Colima y Ciudad de México. Quiero decir que esta diamantina no es la misma que se compra en la papelería”.

Distribución nacional

Aunque su mezcal ha llegado a Estados Unidos, el principal mercado continúa siendo el nacional, pidiéndoles su líquido, habitantes de Colima y Ciudad de México, principalmente.

“Hacemos envíos nacionales a estas dos ciudades, y en lo que se refiere a lugares fuera del país, es cuando la persona viene, lo ve, lo adquiere y se lo lleva”.

Esos son los mercados, explicó, a donde han llegado los mezcales con diamantina comestible en siete colores que van desde el azul, dorado, plata, verde neón, rojo, morado, rosa y fucsia.

La gente que quiera conocerlos o adquirirlos, dijo el entrevistado, los pueden contactar a través de redes sociales, específicamente como Mezcal el Cuajilote en Instagram y Facebook.

En lo que se refiere al costo de esta bebida, la botella de medio litro está en 300 pesos, mientras que el natural está en 400 pesos, y los montos varían dependiendo del tamaño.

Próximo lanzamiento de mezcalada artesanal gasificada

Además del mezcal con diamantina comestible y los diversos líquidos que tienen en su marca Mezcal el Cuajilote, la siguiente propuesta del joven mezcalero es el lanzamiento de una mezcalada artesanal gasificada en botella de vidrio.

“Es hacia allá a dónde debe ir el mezcal, tocar y abrirse varias puertas y llegar a un público más amplio. Eso queremos con estas innovaciones, tenemos mentalidades jóvenes de ir más allá, no quedarnos con lo tradicional y esperar a que se venda hasta donde se pueda”.

Por ello explicó, cuenta con conocimientos de mercadotecnia que aterrizarán en esta mezcalada que espera lanzarla a finales del mes de octubre, o antes de que termine este 2023.

“Estamos en las pruebas y lanzaremos con tres o cuatro sabores diferentes, como mango, maracuyá, pepino con limón, frutos rojos y jamaica”.

Aunado a lo anterior, recordó, otras de las opciones son las cremas de mezcal que están realizadas a base de lácteos, y los licores de mezcal en sabores diversos.

“Las cremas que son en un tipo baileys tenemos de distintos sabores pues tratamos de que sean lo más orgánico posible. En el tema de los licores tratamos de que sea fruta natural”.

Un negocio familiar

Este proyecto mezcalero arrancó en la familia de Jorge Luis por parte de su bisabuelo Marcelino Arreola Maciel, quien tenía su propia vinata.

“Desde él ya somos cuatro generaciones las que continuamos este proyecto, y desde ese entonces, la idea se ha desarrollado conforme a los años, aunque mi bisabuelo comenzó cuando el mezcal era prohibido en la época de la Guerra Cristera, en esa época el mezcal no era una bebida legal y él lo producía a escondidas en las barrancas”.

Según lo comentado por su familia, su bisabuelo les llegó a contar que esta bebida solo podía ser ingerida por los hacendados y gente adinerada, y por nadie más.

“Después de mi bisabuelo continuaron mi abuelo y mi papá, Pedro y José Luis Rocha, después estamos nosotros”.

Conforme han pasado los años, esta actividad que estaba centralizada en los hombres, se ha ido abriendo a la presencia femenina, como en el caso de la marca que promociona Jorge Luis Rocha Arreola.

“Desde la generación de mi papá se comenzaron a involucrar las mujeres, tanto su esposa como sus hijos que somos hombres y mujeres. Actualmente son cuatro mujeres las involucradas, y ayudan bastante”.

Aunque la presencia femenina también es en el campo, ellas figuran más en los viveros, donde comienza el proceso de la planta del maguey.

El proceso de producción

Desde los viveros se comienza a trabajar el tema del mezcal, para después de varios años, ese líquido estar en una botella o en la mesa de las familias a las que les gusta esta bebida.

“En el vivero se hacen camas de tablas y se rellenan con composta y con tierra de pino, después se le pone la semilla que tratamos de recolectar la criolla para que sea más saludable la plántula, a partir de ahí se hace la germinación”.

En este proceso, dijo el joven entrevistado, deben pasar dos años en vivero para poder llegar hacer plantadas en las parcelas ubicadas en los cerros.

“Ya en el cerro se hace la plantación, se cuida que esté cada una con una separación de metro y medio, pues crecen bastante y esta distancia es para que no se estorben en el proceso. Ahí en los cerros duran aproximadamente de seis a siete años, dependiendo”.

Ese proceso lento, comentó Jorge Luis, es el necesario que se debe llevar para poder madurar la planta y después tener un líquido de calidad.

Tumbisca y sus cualidades para el mezcal

La comunidad de Tumbisca es una localidad perteneciente a la tenencia de Jesús del Monte, la cual se localiza la sur de Morelia, y tiene cualidades específicas para el desarrollo adecuado del mezcal, afirmó Jorge Luis el entrevistado.

“Principalmente es por el clima que estamos asentados aquí, es decir, ahí hay un clima de transición que hace referencia a que no está ni muy seco ni muy húmedo, lo que se adapta a la perfección a las plantas de maguey”.

Fue en 2008 cuando la familia de Jorge Luis dio un salto más allá, plantando en las tierras de Tumbisca un total de 5 mil plantas, cantidad que actualmente ha incrementado hasta llegar a más de 50 mil plantas distribuidas por los cerros.

“No nos quisimos esperar a que esas 5 mil dieran frutos, sino que cada año fuimos poniendo más para incrementar la inversión. Actualmente tenemos más de 50 mil plantas en diferentes etapas, edades y años”.

Aunque no son los únicos productores de mezcal asentados en Tumbisca, donde se localizan cerca de 10 productores de mezcal, y más los 30 productores de huertas de maguey, ellos se han ido diferenciado por sus innovaciones al líquido.

Competencia desleal, el principal problema

Dentro del mundo de los mezcaleros, cada uno busca abrirse paso y consolidar sus productos y marcas, situación que ha tenido que enfrentar la familia del entrevistado, explicó.

“Sobre todo porque el mezcal ahorita se está poniendo mucho de moda, pero hay personas que sí tienen el título de maestro mezcalero y otros no, entonces es ahí donde terminamos afectados los mezcales que tenemos calidad”.

De igual forma recordó, en las tiendas de las esquinas también la ciudadanía ha comenzado a encontrar líquido con botellas, sin marca y registro que se hace pasar por mezcal.

“Ese líquido se llama ordinario, es como una bebida, pero se da antes del mezcal, ella no está procesada pues solo tiene una destilada, entonces todo mezcal debe tener de dos a tres destiladas. Esto nos ha afectado directamente”, concluyó.