Morelia, Michoacán, (OEM-Infomex).- El estado de Michoacán no cuenta con un seguro catastrófico para el campo a causa del decreto de extinción de fideicomisos efectuado por el gobierno federal, aseguró el secretario de Desarrollo Rural y Agroalimentario en la entidad Rubén Medina Niño.
El programa de seguro catastrófico, se viene implementando en la entidad desde hace 10 años para el aseguramiento de poco más de un millón de hectáreas de cultivo que, actualmente, están desprotegidas ante las heladas, granizadas, lluvias, sequías o siniestros que afecten a la producción agrícola.
“No tenemos, en este momento, un seguro catastrófico lo estamos buscando con la federación, es una corresponsabilidad, no tenemos en este momento ninguna protección a la actividad agrícola, estamos buscando todavía, la cobertura terminó en el mes de mayo”, apuntó.
En entrevista el funcionario estatal explicó que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) contaba con un fideicomiso de dos mil 500 millones de pesos para este rubro en todo el país, pero ante el decreto de extinción de fideicomisos este recurso fue reintegrado a las arcas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Sin embargo, apuntó que revisan junto con la asociación de secretarios de desarrollo rural en el país las condiciones de cada estado y en busca de que este recurso sea devuelto para contratar un seguro nacional en una sola póliza para todos los estados.
Ante esta situación, dijo, valoran con la Secretaría de Finanzas y Administración (SFA) en Michoacán contratar un seguro de 30 millones de pesos de recurso estatal para las 250 mil hectáreas más vulnerables que principalmente se encuentran en tierra caliente. Pero indicó que, continuará paralelamente insistiendo a la federación ya que en caso de lograr contratar el seguro junto con el gobierno federal éste cubriría los cultivos que fueron sembrados desde el mes de mayo y junio pese a que se contratará después.
Tan solo en el año pasado Michoacán rompió récord de hectáreas agrícolas dañadas por el granizo, la sequía y las heladas que dejaron una afectación de 70 mil hectáreas que aún están siendo pagadas por la aseguradora. El año anterior, el seguro catastrófico para la protección del 60 por ciento del total de las hectáreas agrícolas en la entidad tuvo un costo cercano a los 100 millones de pesos de los cuales el estado participó con 28 millones de pesos.