Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Cada año el inicio de la Cuaresma se marca por el Miércoles de Ceniza, dando paso al periodo de 40 días para transitar a la Semana Santa, culminando con la muerte y resurrección de Cristo, conforme a las creencias católicas.
El Miércoles de Ceniza simboliza el arrepentimiento y expiación de nuestros pecados a través de una marca que se coloca en la frente en forma de cruz, misma que se toma por los feligreses como una penitencia y una conversión de mentalidad para “acompañar” a Cristo durante su Pasión.
Esta celebración, que surgió alrededor del siglo XI, se encuentra contenida en el Misal Romano y es un día para reconocer la fragilidad y la mortalidad.
La tradición más conocida asociada es la de abstenerse de comer carne en este día y cada viernes durante la Cuaresma. Asimismo, todos los feligreses mayores de 18 años y menores de 60 años deben practicar el ayuno, realizando solamente una comida fuerte al día.
La ceniza que se impone en la frente de los creyentes es producida con las palmas del Domingo de Ramos anterior, ritual en el que se queman dichas palmas bendecidas con agua bendita.
“Recuerda que polvo eres y en polvo te convertirás” y “arrepiéntete y cree en el Evangelio” son las palabras que dice el sacerdote al momento de marcar la cruz en los feligreses; dichas palabras se encuentran en el Misal Romano.