Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Policías de Zitácuaro se enfrentaron a balazos esta tarde contra pobladores de la tenencia de Crescencio Morales; el saldo fue de seis agentes lesionados.
Este nuevo episodio violento ocurrió debido a que una parte de la comunidad rechaza el autogobierno, por presuntas anomalías en el proceso de consulta.
Mediante un comunicado, el gobierno de Zitácuaro informó que la Secretaría de Seguridad Pública atendió un reporte debido a la presencia de individuos armados en la comunidad de Macho de Agua.
Elementos de la corporación acudieron al llamado pero al llegar al lugar fueron recibidos con disparos de arma de fuego, por lo que los agentes repelieron la agresión; sin embargo, la fuerza policial quedó rebasada por el número de personas que se sumaron a su ataque.
Los oficiales buscaron resguardo en las cercanías y pidieron refuerzos, en tanto que dos patrullas fueron incendiadas por los comuneros.
Posteriormente, con el refuerzo del operativo, los agresores se dispersaron y abandonaron un vehículo que fue asegurado.
Dos civiles fueron detenidos y quedaron a disposición de la autoridad competente. El saldo es de dos patrullas incineradas y seis policías heridos.
La agresión tiene como fondo la división que impera en Crescencio Morales, donde la mayoría de sus habitantes optaron por regirse por sus usos y costumbres, con un gobierno autónomo y presupuesto propio. Sin embargo, la parte que no está de acuerdo ha decidido usar la violencia como forma de protesta.
Este lunes el gobierno de Zitácuaro hizo un llamado a los habitantes de la tenencia a privilegiar el diálogo en la atención a sus diferencias; asimismo, expresó que la administración no será objeto de presión alguna para interrumpir la aplicación del Estado de Derecho en el municipio.
La tarde del pasado jueves 9 de diciembre, familiares del comisario ejidal de Crescencio Morales, Erasmo Álvarez Castillo, fueron agredidos físicamente por habitantes de ese pueblo perteneciente a Zitácuaro.
El también activista ambiental dijo que unos 80 vecinos de esa ranchería golpearon a dos de sus hermanas y tres de sus hermanos, además de un cuñado, y aunque había elementos de la Policía Michoacán, decidieron no intervenir.