Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- Incontables pérdidas tanto naturales como económicas y la nula presencia de las autoridades son el resultado final del incendio del cerro de La Buja o de la Rosa en la comunidad de Oruscato, el cual “terminó apagándose porque ya no había otra cosa que se pudiera quemar”.

En entrevista exclusiva con El Sol de Morelia, Jorge Ruiz Carmona, jefe de tenencia de la comunidad perteneciente a Los Reyes situada en los linderos del cerro siniestrado, afirmó que a pesar de que un funcionario del Ayuntamiento lo contactó para preguntar por heridos, durante las cuatro horas que duró el incendio no hubo ayuda de ningún nivel de gobierno ni otro acercamiento.

En su ausencia, entre 400 y 500 pobladores de las comunidades aledañas fueron los encargados de combatir el fuego con maquinaria agrícola mientras brindaban de alimento y bebida a las personas que se exponían a las llamas. De las poblaciones que brindaron su ayuda, se mencionó a Sicuicho, Cherato, Cheratillo, Nuevo Zirosto, San José de Peribán, Imbarácuaro, Peribán, Urascato y Patamacuaro.

“Las comunidades de alrededor respondieron a nuestro llamado y llevaron sus maquinarias agrícolas para intentar apagar el fuego, pero no recibimos ayuda de alguna brigada enviada por el gobierno. Me contacté con la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y me dijeron que enviarían personas para mitigar las llamas, pero vienen de otros municipios y apenas llegaron hoy en la noche para corroborar que ya esté apagado”, afirmó el jefe de tenencia.

Como muestra de la falta de atención de las autoridades, Jorge Ruiz puntualiza que este caso no es aislado, ya que hasta obras públicas como el bacheo o la pavimentación de las calles las han realizado por medio de particulares “que se ponen de acuerdo para hacer las cosas y no estar esperando”.

Al respecto de los daños causados, afirma que son invaluables, ya que no solo fueron hectáreas de bosque adulto las afectadas, sino que también muchas parcelas de aguacate y zonas de producción de resina fueron consumidas por el incendio, siendo de suma importancia para la economía local.

“Primero se tiene que revisar qué tanto se quemó, pero no puedes ponerle un valor a todos los árboles adultos que eran nuestros pulmones y que se quemaron; quién sabe cuánto tardarán en volver a crecer. También son hectáreas de parcelas de aguacate y de extracción de resina, Oruscato tiene como principal actividad económica la agricultura y la resina, ahora debemos esperar para ver qué tanto fueron afectados”, mencionó.

Por último, pidió apoyo de las autoridades tanto municipales como estatales para la valoración completa de los daños, así como para la recuperación del cerro.