Morelia, Michoacán.- “No me voy a ir, y no les voy a entregar al PRI”, así lo remarcó el dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Guillermo Valencia Reyes, tras las voces de los priistas que le han cuestionado su permanencia en el Comité Estatal del tricolor.
Al ser cuestionado sobre las recientes declaraciones hechas por la diputada priista, Daniela de los Santos sobre los “errores” cometidos de la dirigencia de Valencia Reyes en este proceso electoral que lo obliga a dejar la dirigencia, el presidente del tricolor respondió que “no son complacencias” y que si alguien quiere que se vaya no lo hará, apoye fue electo por la militancia.
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Aunque dijo que es respetuoso de las declaraciones de Daniela de los Santos y de otros priistas como la diputada, Adriana Hernández Iñiguez, que han señalado los resultados no tan favorables del PRI en el estado, insistió en que en el partido ya no hay grupos como sí existían antes, y que tampoco es el tricolor de Fausto, de Reina ni de los Orihuela.
Según Valencia Reyes, estos grupos políticos ya no influyen en el PRI, porque ya no están, pues según el priista ya se fueron a Morena y a otros partidos políticos. Incluso, remarcó que algunos militantes podrán “patalear” y hasta tomar el partido político, pero subrayó que no le abrirá la puerta a quienes se fueron con otros partidos.
Lo que sí digo bien claro es que no me voy a ir, aquí voy a seguir, porque he hecho un gran trabajo, he recorrido el estado y en esta elección se recorrió apoyando a todos los candidatos, y detuvimos la debacle del partido, así lo consideró el presidente del PRI.
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En rueda de prensa semanal, Valencia Reyes aseguró que sí ha escuchado a las voces que han manifestado su descontento con su dirigencia, pero que no Daniela de los Santos o Adriana Hernández se lo han manifestado de frente, ante lo cual, consideró que se debe hacer política con políticos que se sientan orgullosos del PRI y no de quienes “escondan el logo en campaña”, añadió.
Asimismo, fue enfático en manifestar que no va a hablar con los priistas que se fueron del partido a apoyar a otros candidatos como fue el caso del actual alcalde de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar, porque le hicieron “mucho daño al PRI” e incluso denunció que eran quienes vendían regidurías en varios municipios.