Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El gobernador de Michoacán Alfredo Ramírez Bedolla nombró como secretario de Medio Ambiente a Alejandro Méndez López, un personaje que se ha visto envuelto en diferentes polémicas por daños ambientales, entre ellas su intención de emprender un ecocidio en la tenencia de Jesús del Monte, con la construcción de un fraccionamiento en dicha demarcación, ubicada en un área natural protegida de Morelia.
Fue en febrero de 2021 cuando esta casa editorial documentó cómo, en un evidente conflicto de intereses, Alejandro Méndez, siendo titular de la Notaría Pública 171, cotejó documentación para permitir la construcción de un camino hacia el fraccionamiento Campestre Puerta del Bosque, desarrollo habitacional que se pretendía edificar en la tenencia de Jesús del Monte, en Morelia, y del cual es copropietario.
De acuerdo con un convenio celebrado entre ejidatarios de Jesús del Monte y los copropietarios del fraccionamiento en cuestión, el notario público firmó documentación con la que se avalaba la construcción de un camino para el presunto beneficio de la comunidad de la tenencia, pero también para acondicionar vías de acceso al desarrollo habitacional que, sin éxito, se ha buscado edificar desde 2009.
Lo contrastante en la intención de construir este fraccionamiento en Jesús del Monte radica en el hecho de que el predio pertenece a un área natural protegida de Morelia, situación que, hasta el momento, ha evitado la construcción del coto denominado Campestre Puerta del Bosque.
El antecedente
El riesgo de este nuevo ecocidio fue denunciado desde enero del año pasado, cuando habitantes de Jesús del Monte advirtieron que la construcción de este fraccionamiento vulneraría la capa forestal y riqueza hidrológica que visten al cerro Pico Azul y el manantial El Peral, ubicados al sur de la capital michoacana.
En respaldo a esta advertencia, la investigadora del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Patricia Ávila García, advirtió sobre el riesgo en que se encontraría la cuenca del Río Chiquito, en caso de que llegue a consumarse la construcción del fraccionamiento.
Desde aquella ocasión, la investigadora de la UNAM reseñó que, “desde 1936 existe un decreto federal que reconoce la importancia hidrológica y forestal de esta zona, además de otro decreto que emitió el gobierno del estado desde 2011, donde esta reserva, que lleva por nombre Pico Azul-La Escalera, fue reconocida como área natural protegida”.
“Es un delincuente ambiental”
Bajo este antecedente, la doctora Patricia Ávila García condenó en entrevista que el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla “haya nombrado como secretario de Medio Ambiente a un delincuente ambiental, y a un corrupto, cuando se supone que la 4T busca atacar la corrupción que impera en el país”.
“Es lamentable la decisión de Alfredo Ramírez de definir a este personaje, pero no sólo eso es lamentable, sino que además preocupa que el gobernador siga sin escuchar al sector ambiental, porque se le dijo que este personaje no era la persona ideal para ocupar un puesto de política ambiental”, enfatizó.
Ávila García remarcó que con esta designación quedaría claro que el gobierno emanado de Morena no trabajará de la mano con el sector ambiental, y que no se revertirá la crisis que el estado enfrenta en la materia, cuyos alcances han provocado una deforestación anual de hasta 66 mil 752 hectáreas, de acuerdo con datos ofrecidos por la Comisión Forestal de Michoacán (Cofom).
Bedolla, lejano a ambientalistas y cercano a aguacateros
La investigadora de la UNAM también condenó que, lejos de atender la crisis ambiental que enfrenta Michoacán, derivada en gran medida de la plantación ilegal y desmedida de aguacate, el gobernador Ramírez Bedolla haya anunciado recientemente que buscará la certificación de los productores de este fruto en el estado, bajo la justificación de fortalecer la exportación agroindustrial.
“Es también lamentable que el gobernador, además de premiar a un delincuente ambiental con un nombramiento en su gabinete, pretenda purificar a los aguacateros de Michoacán, cuando éstos son los principales responsables del daño ambiental al que hoy nos enfrentamos”, condenó.
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Ante este escenario y con la llegada de Alejandro Méndez a la Secretaría de Medio Ambiente, Ávila auguró un panorama desalentador para la riqueza forestal del estado, tras remarcar que existe un notorio distanciamiento entre la nueva administración y los especialistas en la materia.
