Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Morelia se ubica entre las 13 ciudades mexicanas con potencial para ser una smart city o ciudad inteligente, de acuerdo a la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), sin embargo, uno de los grandes retos para empezarla y consolidarla es la participación de la ciudadanía y el mejoramiento de servicios básicos, afirmó el secretario de Desarrollo Urbano y Movilidad municipal, Pedro Núñez González.
Por su parte, el maestro en tecnología educativa y docente de la UVAQ, Marco Antonio Guzmán Ponce de León, indicó que para que una ciudad pueda ser inteligente tiene que cumplir con lineamientos de una ciudad común, es decir, que no tenga problemas de agua, drenaje, telefonía y luz y Morelia no cumple esos parámetros, además debe haber disponibilidad, integridad de datos, confidencialidad y responsabilidad por parte de los usurarios, pero en México aún no están preparados.
Una smart city es, a decir del titular de la dependencia, un concepto que se desarrolla en conjunto con un hábitat y un grupo de ciudadanos enfocados a la innovación, no solo tecnológica sino también integral que puede ser trabajada con baja o alta tecnología (law tech o high-tech).
El objetivo es potenciar las oportunidades que puede ofrecer una urbe, como Morelia, y junto con la innovación vincularla con creatividad que detonen en proyectos y que estos sean los catalizadores de actividades que giran en torno a la ciudad y a su vez, puedan ser entendidas como áreas de desarrollo.
De acuerdo al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en México existen cuatro ciudades inteligentes: Tequila Inteligente y Ciudad Creativa en Jalisco, Maderas en Querétaro y Smart City en Puebla cuya inversión ha sido muy costosa en cada caso.
En el caso de Morelia, los requisitos que cumple para ser una smart city son el tamaño de ciudad media, ubicación geográfica, condiciones de temperatura, topografía, paisaje, flora, fauna los cuales tienen potencial para desarrollarse.
Los retos
Para el secretario “el problema no es el dinero, el arquitecto chileno Alejandro Aravena, ganador del premio Pritzker menciona que el recurso más demandado en los gobiernos latinoamericanos no es el económico, sino las coordinación entre sus gobiernos”, apuntó.
Al ser cuestionado si en Morelia eso es complicado, comentó que se trata de algo complejo ya que cada ciudadano es una realidad que debe ser atendida y con la ausencia de participación es difícil que suceda.
Asimismo, dijo que es necesario definir qué ciudad queremos, ya que el 99% de las personas habla de una ciudad construida arriba de un automóvil, lo que catalogó como una visión incorrecta ya que en la capital michoacana solo el 26% de los habitantes se mueven en un auto propio.
Otros rubros o retos que necesitan ser atendidos primero son la normatividad municipal, el transporte público, el sistema de paradas en la ciudad; “hay temas muy básico que nos van a demandar mucho tiempo, pero hay otros que pueden empezar a suceder en los inmediato (…) se requiere de mucho trabajo desde muchos frentes, una ciudad que pretende ser smart city no puede tener más de 600 colonias irregulares y tenemos que poner orden ahí, empezar a identificar las necesidades”, dijo.
Finalmente, explicó que se encuentran en la concreción de participar en la red de ciudades inteligentes en alianza con Smart City Latam y hasta el momento están en talleres y participando para la posibilidad de concretar estrategias que permitan aterrizar los proyectos.
Ecosistemas tecnológicos
El docente de la UVAQ, refirió que más que una ciudad se trata de territorios inteligentes ya que una urbe completa es complicado por sus condiciones, además que estos proyectos deben conformarse de un ecosistema inteligente: gobierno, habitantes, visitantes y empresas para que funcione.
Agregó que la inversión de tecnología es muy alta y debe estar en constante renovación, además que las ciudades antes mencionadas no han podido concretar al 100% sus proyectos por lo que no aparecen en la lista mundial. Algunas ciudades consolidadas son Barcelona, Nueva York, Tokio y Toronto.
“Sería complicado totalmente una ciudad, incluso con dinero porque requiere mucha inversión y que los usuarios estén preparados para compartir información y en México aún no lo estamos, además debe haber igualdad de oportunidades para todos porque de lo contrario estarías creando una brecha tecnológica como la del internet, esto no es una cuestión de lujo”, finalizó.
