Morelia, Michoacán, (OEM-Infomex).- Orgulloso de sus raíces Morelianas, Erick Ernesto Rincón Jaramillo, conocido artísticamente como Ericc Rincón, es un joven de 25 años, con una preocupación notoria por la situación que se vive en el país en torno a la crisis sanitaria causada por el virus del Covid-19.
Desde niño su padre Miguel Rincón, que también es artista visual, le inculcó el gusto por el arte y las humanidades. A lo largo de su carrera ha sentido gran empatía por los movimientos sociales, lo que no le permitió sin indiferente ante la situación que atraviesa el mundo.
Decidido a aportar su granito de arena el egresado de la licenciatura en Artes Visuales, transmitió un mensaje de aliento a los habitantes de la capital michoacana en el Acueducto y la fachada del templo de San Francisco ubicado en la Plaza Valladolid, fueron el escenario donde alrededor de las 19:30 horas se pudo apreciar el mensaje “Pronto nos volveremos a abrazar”.
Elegí esta frase principalmente por que el estar lejos de nuestros seres queridos es una de las cosas complicadas de esta cuarentena, generalmente mis proyectos son más elaborados pero en este caso quería que el mensaje fuera directo y un poco crudo, sin adornarlo para que quien lo viera interpretara su situación ante el problema o creara consciencia con ello
A la pregunta del porque se hizo la proyección en esos lugares, Ericc, expresó: “Decidí realizarlo en estos lugares ya que es un proyecto ilegal sin ningún permiso, entonces la luz la tengo que conseguir de donde sea”.
Aunque en un principio su intención también fue proyectar el mensaje en Catedral, expresa que la falta de equipo se lo impidió, ya que esta iniciativa es propia y no recibe ningún tipo de apoyo.
Por otro lado, se considera una persona inspirada en ayudar a la sociedad, confiesa que humanizar y concientizar siempre ha sido su objetivo, por lo que también ha participado en otros movimientos sociales como es caso del movimiento feminista ocurrido el 8 y 9 de marzo pasado, donde también proyectó en la fachada de la Catedral, el mensaje: “Ni una menos”.
Quise mostrar mi apoyo a las mujeres en un momento donde el problema parecía olvidado, pero siempre siendo consciente del movimiento feminista para tratar de no afectar de ninguna manera posibleEntre sus metas a corto plazo están de la de seguir produciendo material visual, intervenir con proyecciones en diferentes lugares y continuar con su propósito activista.