En México, los aranceles son impuestos aplicados a la importación o exportación de bienes y servicios al cruzar las fronteras nacionales. Su objetivo principal es regular el comercio exterior, proteger a los productores nacionales de la competencia extranjera y generar ingresos.
Recientemente, Donald Trump anunció su intención de imponer un arancel del 25% a todos los productos provenientes de México y Canadá a partir del 20 de enero de 2025, en caso de asumir nuevamente la presidencia de Estados Unidos. Este anuncio ha generado preocupación en el ámbito económico y político.
“El 20 de enero, como una de mis primeras órdenes ejecutivas, firmaré todos los documentos necesarios para cobrar a México y Canadá un arancel de 25 por ciento sobre TODOS los productos que ingresen a los Estados Unidos y sus ridículas fronteras abiertas”, advirtió ayer Donald Trump en redes sociales”
Ante esta declaración, la presidenta Claudia Sheinbaum envió una carta en la que destacó los esfuerzos de México por reducir la migración ilegal hacia Estados Unidos, logrando una disminución del 75% durante los primeros once meses de 2024.
¿Cómo afectarían estos aranceles a México?
El aumento de aranceles podría tener efectos significativos en distintos sectores en todo el país:
Los productos importados por Estados Unidos se encarecerían, elevando el costo de bienes esenciales como alimentos, tecnología y maquinaria. Esto podría afectar directamente el bolsillo de los consumidores mexicanos, reduciendo su poder adquisitivo.
También podrían disminuir la presión para mejorar su competitividad a nivel global.Además con este incremento se podría generar tensiones en acuerdos comerciales como el T-MEC, afectando las exportaciones mexicanas y comprometiendo las relaciones internacionales.
Si otros países responden con medidas similares, los productos mexicanos podrían enfrentar mayores dificultades para competir en mercados internacionales.
¿Cómo afecta a consumidores y exportadores?
Para los consumidores los precios de productos importados podrían aumentar significativamente, impactando especialmente a las familias de menores ingresos.
Y para los exportadores a las empresas mexicanas que dependen del comercio con Estados Unidos podrían enfrentar barreras adicionales para mantener su competitividad en el mercado.
Aunque los aranceles buscan proteger la economía interna, su implementación puede desencadenar efectos negativos, tanto en el ámbito nacional como internacional. Por ello, las decisiones en materia comercial deben tomarse con cautela para mitigar sus impactos y evitar conflictos mayores en el comercio global.