Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- El pasado domingo, primer día del periodo de campañas electorales, el candidato a la gubernatura del Equipo por Michoacán, Carlos Herrera Tello, asistió a la comunidad de Santa Cruz Tanaco, municipio de Uruapan, para “pedir permiso a la Madre Tierra” y recibir como regalo un bastón purificado.
La iniciativa, sin embargo, no cayó bien a representantes indígenas de la región purépecha, tal es el caso de Pedro Victoriano Cruz, quien en entrevista para El Sol de Morelia asegura que este acto significó solo una simulación con intereses electorales, pues se ha demostrado que a los políticos “no les importa el desarrollo ni mucho menos las tradiciones del pueblo purépecha”.
Ya en su propia cuenta de Facebook, Victoriano Cruz advertía: “Una afrenta y burla a lo más cruel al pueblo p'urhépecha, eso significó la ceremonia frente a Kurhukuaeri (Fuego) el arranque de campaña en Tanaco y barrios de Uruapan de los candidatos a la gubernatura y diputados federales de la coalición PRD-PRI-PRD justo un día antes de un aniversario más de la masacre a la comunidad de Arantepacua (cuatro comuneros asesinados, 10 heridos, 38 torturados y más 50 domicilios allanados ilegalmente)”.
En charla para este medio, abunda: “Es una falta de respeto, nuestra cultura no nació ayer, no es una colonia nueva, es una cultura milenaria de por sí golpeada por el proceso de la Colonia… Los partidos, en los hechos, no toman en cuenta a los pueblos indígenas; las cuatro etnias en el estado solo han servido para figuras decorativas, para impulsar campañas a través de la danza, de la música, de la comida”.
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Pedro Victoriano Cruz asegura que la lucha de la comunidad purépecha no es por presupuestos, pues el movimiento estatal ha sido para reconstruir la forma de vida que tenían antes sin desfragmentarse del Estado.
Por ello, en la publicación de la red social subraya: “El candidato a la gubernatura y diputados federales del PAN-PRD-PRI no comulgan ni creen en nuestra cosmovisión, no son participes de nuestro honor comunitario; nunca han realizado servicio comunal a nuestro pueblo, nunca han sido solidarios con los problemas de los purhépecha, nunca han defendido a nuestro pueblo, por esos motivos no podrían ser merecedores de estar frente a una ceremonia de Kurhikuaeri”.
Finalmente, dice que seguirá luchando por despertar la conciencia de la gente y no se vean más escenas de políticos recurriendo a símbolos considerados como milenarios “a cambio de una dádiva, una promesa de campaña”.